Vestas no se ablanda con la movilización de León e inicia la cuenta atrás del cierre
El Gobierno abre una línea de trabajo para mantener la actividad y la eólica negocia el despido con los empleados.
Representantes que Vestas envió a León a negociar el despido de 362 empleados. FERNANDO OTERO
l. urdiales / agencias | redacción
La dirección de Vestas notificó ayer a los representantes de la plantilla de la factoría de Villadangos el ERE de extinción para los 362 empleados de la fábrica. Así se inicia la cuenta atrás administrativa para hacer efectivo el despido de 362 empleados y agotar la actividad que genera carga de trabajo para cuarenta empresas leonesas, que repercute en la nómina de otros mil quinientos empleados. Impasible ante la presión demostrada por la movilización de la ciudadanía leonesa, Vestas mantiene la hoja de ruta prevista para echar el candado en la factoría de aerogeneradores que hasta hace pocos meses señalaba como referencia de su grupo. La representación de los trabajadores que forman la mesa negociadora del ERE se negó a recibir la documentación presentada por los enviados de la multinacional a emprender el proceso de liquidación y cierre de su presencia de doce años en el polígono industrial leonés. La argucia legal para negarse a recepcionar la documentación hace referencia a que la convocatoria de la reunión detalla que esta cita de ayer iba a ser anterior al registro del expediente. «Entendíamos que la convocatoria era para que la empresa confirmara si seguía adelante con sus planes o si había rectificado», explicó ayer Francisco Romero, responsable de la Fica UGT en León, sobre el sentido y la profundidad de la negativa de los trabajadores a recibir la documentación.
La estrategia de la parte laboral afectada por el cierre dilata los plazos; a la par que en Madrid, el Gobierno de España abrió ayer otra vía de esperanza para los trabajadores de Vestas que tienen detrás todo el aliento de la sociedad leonesa, tal y como se demostró en la movilización del pasado jueves. La ministra portavoz del ejecutivo de Pedro Sánchez informó ayer al finalizar el Consejo de Ministros de una nueva dimensión para este litigio. «La titular del ministerio de Transición Ecológica ha mantenido una reunión con directivos de Vestas para iniciar los trabajos que impidan que el fabricante danés de aerogeneradores cierre su planta de Villadangos», explicó Isabel Celáa entre diferentes cuestiones de las que dio cuenta tras la cita semanal gubernamental.
Un mes por delante
Los representantes de los trabajadores no están dispuestos a asimilar ahora que a partir de ayer, desde la reunión mantenida en un hotel de la capital leonesa con los enviados de la multinacional Vestas, se empieza a descontar el plazo de un mes para el periodo de consultas que depende del proceso de cierre y liquidación. . «La empresa considera que hoy (por ayer) ya es el primer día para que empiecen a correr los plazos, pero nosotros nos hemos negado a recoger la documentación», explicó el sindicalista Francisco Romero. «La citación era previa al registro del ERE y en ese defecto de forma en la convocatoria se justifica la negativa a recibir la documentación». Los responsables de la compañía anunciaron a los representantes de los trabajadores que iban a registrar ayer tarde la documentación en la Oficina Territorial de Trabajo; esto obliga a la parte laboral negociar el expediente de extinción de contratos. En dos días, nueva entrega del proceso.