El primer paso a superar será en 2021 con una autoevaluación
La Facultad de Veterinaria consiguió el marchamo europeo con un «aprobado perfecto» en marzo de 2017. Pero la acreditación no es permanente y la Asociación Europea de Facultades de Veterinaria realiza controles periódicos hasta que, en el plazo de siete años, cada centro debe volver a someterse a una nueva evaluación en la que se ratifica si se siguen cumpliendo los objetivos. El próximo 2021, la facultad leonesa deberá presentar un informe en el que justifique qué medidas se están tomando, cómo se está trabajando y si se continúa cumpliendo los estándares, como recordó la decana, María Teresa Carbajo. «Tenemos que comunicar que seguimos trabajando en una buena línea», resumió. La nueva evaluación será en el 2024. Hasta esa fecha, Carbajo se plantea como objetivos fundamentales seguir aumentando el número de prácticas, el número de casos clínicos y también aumentar los casos de grandes animales o equinos. Pese a los fallos detectados, desde la asociación europea siempre se inicidió en que, entre las fortalezas del centro leonés —el único en Castilla y León y uno de los más antiguos de Vegazana— estaba el elevado nivel del personal docente e investigador, así como las instalaciones de La Granja de la facultad y su nivel de actividad, a lo que añadieron las enseñanzas de áreas como Higiene, Inspección y Tecnología de los Alimentos, entre otros.