Diario de León

El Gobierno firmará «en pocos días» un plan de reindustrialización con Vestas

La ministra Maroto se reunirá mañana con el inversor que pretende quedarse con la factoría.

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La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, anunció ayer en Barcelona que mañana mantendrá una reunión con el inversor interesado en la planta de Vestas en Villadangos del Páramo, por lo que quiere garantizar que Vestas se ocupe del «mantenimiento de la planta hasta finales de 2019». La ministra también afirmó que prevé firmar «en pocos días» con Vestas un plan de reindustrialización que sirva para paliar el cierre de la planta de esa multinacional en la localidad leonesa.

De hecho, este sábado la consejera de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Pilar del Olmo, anunciaba un inversor extranjero «de éxito en España» que estaría dispuesto a hacerse cargo de la planta de Vestas. Hay un nombre que suena con gran fuerza, pero las partes negociadoras insisten en no desvelar una operación de la que depende mucho empleo.

Precisamente ayer, el presidente del comité de empresa de Vestas, Juan Francisco García, explicó que los trabajadores de la factoría volverán a sus puestos de trabajo a partir de este jueves tras llegar este domingo a un acuerdo con la multinacional en la negociación del ERE.

Por su parte, La multinacional danesa valoró el acuerdo alcanzado con los trabajadores de la factoría de Villadangos sobre el expediente de regulación de empleo que incluye, según su comunicado, un «ambicioso» plan de recolocaciones, la reducción del número de afectados y la mejora en las condiciones de salida de hasta 67 días por año trabajado.

La empresa anunció el acuerdo suscrito con «apoyo de la representación de sindical y la ratificación», anteayer en León, de más del 90 % de los trabajadores.

El ERE acordado implica la extensión de los contratos del personal indefinido hasta el 31 de diciembre de 2018 y un «ambicioso plan de recolocación y reinserción en el mercado laboral con la posibilidad de reubicarse en otras fábricas y centros de trabajo de Vestas dentro y fuera de España».

Se incluye un «plan de recolocaciones externo durante 24 meses que tiene como objetivo la reinserción del 80 % de la plantilla que participe en dicho plan», y se prevén «medidas especiales para los trabajadores mayores de 54 años, jubilaciones parciales, un plan de bajas incentivadas y un bono ligado a la reanudación de la producción».

En cuanto a las indemnizaciones, «Vestas ha ofrecido hasta 67 días por año trabajado, más un lineal de 1.000 euros», y la compañía también «va a facilitar la salida a través de bajas voluntarias incentivadas con igual indemnización, pero con un lineal de 500 euros».

Para «atenuar las consecuencias del despido colectivo e incentivar la reanudación de la producción en condiciones normales de clima social y calidad, Vestas también ha ofrecido un bono a la producción equivalente a 15 días de salario bruto por año de antigüedad».

Condiciones de salida

«El resultado de las negociaciones ha sido satisfactorio para ambas partes y nos alegra mucho haber logrado un acuerdo con los trabajadores que permita atenuar el impacto del cierre de la fábrica a finales de año. Cesar nuestra actividad en León con unas buenas condiciones de salida para el personal de Vestas ha sido siempre importante para la compañía», declaró en el comunicado el director de operaciones de Vestas, Jean-Marc Lechêne.

El plan también contempla el compromiso por parte de Vestas de mantener en buen estado la planta tras darse por finalizada la producción en 2018 con el fin de favorecer la reindustrialización a través de un nuevo inversor.

El comité de empresa de la factoría de Villadangos del Páramo valoró como un «buen» preacuerdo que «mejora sustancialmente» las condiciones ofrecidas por al dirección de la empresa al inicio de las negociaciones de aplicación del ERE de extinción.

discontinuos frustrados

Sin embargo, no todos están satisfechos con esta negociación. Es el caso de los que eran trabajadores eventuales. En un escrito dirigido a este periódico, uno de los 86 afectados afirma que la «alta compensación económica se ha conseguido, entre otras cosas, gracias a la extinción completa de los derechos de los trabajadores temporales que, por una sentencia, somos indefinidos». Resulta que su compensación será de mil euros más 15 días de trabajo por falta de preaviso de parte de la compañia. «Ni siquiera 20 días por año trabajado que exige la ley», sostiene. A lo que añade: «El egoísmo mostrado por parte del comité en esta negociación no tiene límites, y ha dejado a 86 temporales que por ley ya eran indefinidos, en la calle y con una ‘limosna’».

Un comunicado firmado por el secretario de Industria de Comisiones Obreras en León, Ángel Santos, ensalzaba ayer a la plantilla de Vestas «por sus 101 días de huelga, claves para doblegar la voluntad de la multinacional»; entendiendo por «doblegar» el cierre de la planta.

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