SEGURIDAD VIAL
Más de 200 coches entran al casco antiguo por los colegios
León pide a los centros colaboración para su plan de caminos seguros.
La plaza de San Isidoro es el punto en el que más vehículos se acumulan. DL
álvaro caballero | león
El Ayuntamiento de la capital leonesa presentó ayer a los colegios del casco histórico el plan para reducir los vehículos en la zona peatonal y mejorar la seguridad vial, centrada sobre todo e Educación Infantil y Primaria. Con más de 200 vehículos que entran cuatro veces al día, en coincidencia con los horarios educativos, a la ciudad antigua sólo para dejar a los alumnos en sus respectivas escuelas, los concejales de Seguridad y Movilidad y Urbanismo y Medio Ambiente, Fernando Salguero y Ana Franco, acompañados por la técnico responsable del proyecto, Cristina Villalón, reclamaron a los representantes de Ponce de León, Discípulas de Jesús, Carmelitas, Leonés San Isidoro y Teresianas la colaboración de sus comunidades educativas para definir una estrategia conjunta con la que definir «caminos seguro» que compartan varios centros para llegar a pie o en bicicleta.
Los responsables de la administración municipal trasladaron a los directores que «durante los próximos tres meses se realizará un estudio» con el objetivo de evaluar «los diferentes métodos de transporte e itinerarios de estos alumnos», como expuso el concejal de Movilidad y Seguridad. El documento se elaborará con la información que se recoja en las «reuniones periódicas con profesores y asociaciones de madres y padres», abundó Salguero, quien incidió en que «el estudio de la movilidad escolar segura de los alumnos» ayudará a «fomentar los modos blandos de transporte», en los que prime «la movilidad peatonal, en bicicleta y en transporte público».
La iniciativa, que espera entrar en funcionamiento en el primer trimestre del próximo año, se complementará con la creación de zonas de aparcamiento disuasorio en el entorno del casco histórico, como el mercado de San Pedro detrás de la Catedral, donde los niños lleguen en coche y se incorporen a los trayectos peatonales hasta la puerta de sus centros. Estos puntos, que se decidirán tras la consulta con los portavoces de las comunidades educativas, ayudarán a que haya menos vehículos en rotación dentro del casco antiguo, sobre todo en los horarios de entrada y salida de clase, lo que aumentará la seguridad de los escolares que a diario transitan por la zona.
La creación de estos caminos seguros, que ya contó con una iniciativa piloto el pasado mandato en Ponce de León, necesitan la colaboración de padres y profesores. Estos dos grupos serán los que se encarguen de manera principal de guiar a los grupos de escolares por los «caminos seguros», como trasladaron a los responsables de los colegios. No serán los únicos. El Ayuntamiento reseñó que se buscará afianzar la figura del «comercio amigo», que contará con «un emblema o marca que se situará en un lugar visible para indicar a los niños que, si tienen algún problema, ahí les van a socorrer y a ayudar», avanzó Salguero.