León estudia adelantarse a la DGT y rebajar la velocidad a sólo 30 por hora en la ciudad

álvaro caballero | león

Ni esperará, ni se quedará con una aplicación a medias. El Ayuntamiento de León estudia adelantarse a la nueva modificación del Reglamento de Circulación que plantea la Dirección General de Tráfico (DGT). El consistorio limitará la circulación a 30 kilómetros por hora. La medida, que ahora estudian los técnicos de la Concejalía de Movilidad y Seguridad, no afectaría tan sólo a las calles de un único carril por dirección, como se plantea en la normativa estatal y ya se ha entrado en vigor en funcionamiento de manera reciente en Madrid, sino que se aplicaría a todas aquellas que forman parte del casco urbano de la ciudad, así como al callejero de las pedanías de Armunia, Trobajo del Cerecedo y Oteruelo de la Valdoncina.

La decisión se asienta en los estudios efectuados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Conferencia Europea de Ministerios de Transportes. Estos organismos remarcan, basados en casos reales de accidentes, que el riesgo de fallecer para un peatón o un ciclista en un atropello con un vehículo se reduce del 80% en el caso de que se sufra a 50 kilómetros por hora a tan sólo el 10% en el caso de que el impacto tenga lugar a 30 kilómetros por hora.

La conclusión de estos estudios se complementa con los resultados conseguidos en los barrios de la ciudad en los que se implantó hace ya años la zona 30. San Claudio, San Mamés, El Ejido, el campus de la Universidad y parte del Crucero se benefician de esta regulación, que implica no sólo la limitación de la velocidad sino también la preferencia de los peatones sobre las bicis y de éstas, a su vez, sobre los coches. A mayores, se suman otras vías específicas, como Papalaguinda y Fernández Ladreda, en las que únicamente está rebajado el límite a 30 kilómetros por hora, pero sin las demás consideraciones asociadas, así como el ciclocarril que va desde la plaza de Toros hasta Eras de Renueva. En todos los casos, según trasladan desde la Concejalía de Movilidad y Seguridad, dirigida por Fernando Salguero, la entrada en vigor de la medida ha supuesto la eliminación casi por completo del parte de atropellos registrado por la Policía Local.

La extensión de estos resultados al resto de las cerca de 5.000 calles del municipio guía el estudio que ahora está sobre la mesa y que se orienta también a la mejora de convivencia de los coches y las bicicletas. La iniciativa municipal va un paso más allá de adecuarse a la idea trasladada por el director general de la DGT, Pere Navarro, para que afecte a las vías con un solo carril o con dos si uno es en cada sentido. No se quedará en esta restricción, que afectaría al 80% de las calles de la ciudad. Ni siquiera se contempla que se salgan de este corsé de velocidad de 30 kilómetros por hora calles del interior del casco urbano en las que hay dos carriles por cada dirección, como las avenidas Reyes Leoneses o Universidad, que quedarían eximidas de la normativa estatal. La única excepción se marca para las vías interurbanas, como el tramo de la N-120 que da entrada desde Oteruelo hasta el antiguo cruce de Michaisa, o las rondas Este y Sur, que mantendrán las limitaciones de 70, 100 y 120 kilómetros hora que tienen ahora.