LA ECONOMÍA DESPUÉS DE LA POLÍTICA
El 'brexit' pone en jaque contratos por casi 110 M€ entre León y Reino Unido
La amenaza de futuros aranceles se cierne sobre los 96 millones del negocio de las exportaciones y los 12,8 de las importaciones
A menos de tres meses de la salida del Reino Unido de la Unión Europea —prevista para el 29 de marzo— y en pleno tenso debate en el país anglosajón sobre si aceptan o no el abandono pactado del club comunitario, están en juego las condiciones de la relación comercial futura con los que serán sus exsocios. Brexit blando o brexit duro: continuar con una relación prácticamente como la existente o la imposición de aranceles. Ante esta situación, las empresas leonesas con negocios en Gran Bretaña contienen la respiración: penden de ese hilo cerca de 110 millones de euros en contratos entre la provincia y este país, de acuerdo a las cifras con las que cerró la balanza comercial entre ambos territorios en 2018, según los datos reflejados por la Secretaría de Estado de Comercio a través de las Estadísticas del Comercio Exterior Español (Data Comex).
Las exportaciones leonesas al Reino Unido alcanzan los 96,3 millones de euros, la cifra más alta desde 2013. A la cabeza de las ventas destacan los bienes de equipo (material de transporte y otros), las semimanufacturas (hierro y acero, fundamentalmente) y el sector de la alimentación y las bebidas (productos cárnicos y lácteos, y huevos, sobre todo). En el otro lazo de la balanza comercial, los británicos venden a León por valor de 12,8 millones de euros, especialmente productos químicos, maquinaria específica, otros bienes de equipo y cereales.
La profesora de Economía de la Unión Europea de la Universidad de León y presidenta del Colegio de Economistas de León, Nuria González, advierte de que «con el brexit todos pierden, nadie gana» y explica que «de uno duro a uno blando la repercusión será diferente en todas las dimensiones del acuerdo comercial ente la UE y Reino Unido y vital para la estructura de nuestro comercio exterior».
En el caso de una salida pactada, un acuerdo que tendrá que votar el Parlamento británico el martes próximo, «las relaciones comerciales seguirán siendo fluidas, mientras que si prospera la línea dura habrá que renegociar toda la relación comercial entre este país y la UE, lo que llevará implícito la imposición de aranceles y acarreará dificultades extraordinarias a las empresas leonesas que hacen negocios con Gran Bretaña».
De todas formas, confía en la negociación y enfatiza que «nadie quiere un brexit duro porque implicaría renegociar todos los acuerdos comerciales».
Y el responsable de dos empresas leonesas con numerosos contratos con Reino Unido, sobre todo con clientes de la City de Londres, Xeridia y Smarkia, Roberto Vidal, manifiesta que cerca del 30% de su negocio exterior tiene como destino Gran Bretaña. Desde el Parque Tecnológico diseñan aplicaciones para sectores como telecomunicaciones, banca, industria o seguros. En Londres cuentan con una sociedad para la gestión de los contratos. «Yo creo que al final la lógica se impondrá y habrá acuerdo, ahora están con el tacticismo. Nosotros seguimos haciendo negocio como si no ocurriera nada». De lo contrario, tendrían problemas con la facturación y el personal.