El negocio de la ORA en León

El negocio de la ORA se mantiene estable. La empresa mixta Eulsa cerró el ejercicio 2018 con unos ingresos de 3.780.557,07 euros, cerca de 13.900 euros por cada jornada de trabajo. Apenas suponen una reducción de 15.293 euros con respecto al año anterior, que marcó el récord de resultados de la sociedad desde su creación en el año 2001, y confirma la estabilización de la conducta de los conductores: no merman los vehículos en la vía, ni aumentan las sanciones impuestas, pero sí que se incrementa el tiempo de estancia en el estacionamiento y cada vez se anulan más sanciones durante el día de imposición para evitar que sean reclamadas por la Policía Local y aumente la factura de 9,50 a 60 euros para el infractor.

Los registrados, expuestos ayer en el consejo de administración de Eulsa, en la que el Ayuntamiento de León cuenta con el 57% y la mercantil Empark representa el 43% restante, muestran que las sanciones cayeron un 2%. Los controladores de la ORA firmaron 100.949 boletines de denuncia, lo que en términos absolutos suponen 2.115 multas, una bajada mínima dentro de la línea de progresión que empezó con las 81.377 de 2014 y avanzó año tras año: 83.433 en 2015, 97.645 en 2016 y 103.057 en 2017. Dentro de esta bolsa, la anulación de denuncias en el mismo día de imposición alcanza ya el 81,6%, por encima del 79,61% del ejercicio precedente, lo que supone mayores rendimientos para la ORA, dado que una vez que pasan a ser tramitadas por la Policía Local, que ha aumentado la presión para notificar y reclamar por la vía ejecutiva, ya no contabiliza el ingreso que deben hacer los infractores.

El grado de cumplimiento hace que incluso en la zona azul, con unos ingresos de 3.167.471,87 euros se hayan aumentado los resultados del año pasado en poco más de 3.500 euros. No pasó lo mismo con la zona naranja, ubicada en los aparcamientos de San Pedro y el tanatorio y en la avenida de la Facultad, donde los estacionamientos de larga estancia bajaron de 497.538,31 a 591.833,2 euros; ni tampoco en el área verde de residentes, donde pese a que aumentaron 104 tarjetas, hasta alcanzar las 2.929, los ingresos se quedaron en 491.833 euros, frente a los 497.538,31 euros. En este balance resalta sobre todo el comportamiento al alza del pago mediante las aplicaciones del móvil, que representa ya el 41,79%, diez puntos más que en 2017. Por contra, el desembolso con tarjeta de crédito ronda el 1,5%.

Pero la mayor de las diferencias en la comparativa, que hizo que el resultado fuera un poco inferior, se apunta con cargo a los ingresos por ocupación de vía pública. El descenso de la actividad de obras en la calle, que hace que sus promotores tengan que pagar por la instalación de contenedores y andamios, hizo que el balance se quedara en 37.352,41 euros, muy por debajo de los 53.842,83 euros que se consiguieron en el ejercicio precedente por parte de la ORA, que grava de esta manera los estacionamientos que no se puede utilizar.

La radiografía del cobro por el estacionamiento, que se ajusta a 125 calles, de lunes a viernes de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas, además de los sábados por la mañana, queda expuesta en los datos de uso y estancia. Los vehículos mantuvieron una ocupación media del 83,52%, por debajo del 83,74% del año anterior, pero el importe medio del tique subió hasta los 0,894 euros. La conjugación de estos parámetros hace que la recuperación de cada plaza de estacionamiento por hora sumara 0,53 euros.