La fiscalidad de las aportaciones, el beneficio que más se valora
Las gestoras confían en que durante este año las aportaciones aumenten o al menos se mantengan, y señalan que la preocupación por la evolución de las pensiones públicas y los cambios que se anuncian es lo que determina la sensación de que los ciudadanos volverán a esta fórmula de ahorro. Unas herramientas en las que los partícipes valoran sobre todo la fiscalidad en las aportaciones, más que la seguridad o una gestión profesional.
Desde la Dirección General de Seguros se considera que la caída en el número de personas que contratan fondos de pensiones (a nivel nacional se ha producido también un descenso en el patrimonio acumulado, al contrario de lo que ocurre en León) se debe también al trasvase del ahorro hacia otros productos, como los planes de previsión asegurados o las rentas vitalicias. Y también al largo período ya en un entorno de tipos de interés muy bajos, por la política de estímulos del Banco Central Europeo. Eso se traduce en un cambio de la inversión hacia productos con mayor rentabilidad, aunque generalmente los partícipes apuestan por el menor riesgo en estos productos.
Según Inverco, el perfil del ahorrador en planes de pensiones es de un hombre de entre 51 y 55 años, que tiene acumulado un patrimonio de entre 9.000 y 15.000 euros en el producto. Los planes de renta fija mixta son los más demandados a la hora de elegir un producto para la jubilación, seguidos a distancia de los planes de renta fija y garantizados. Sólo un 10% elige los planes de renta variable mixta.