el nuevo CENTRO sale a la luz
El conservatorio tendrá forma de caja y más espacio que el planteado por la Junta
Los arquitectos del proyecto revelan por primera vez cómo será el nuevo centro en La Palomera.
Los arquitectos Primitivo y Noa González con el proyecto del conservatorio.
El nuevo conservatorio que se levantará en el barrio de La Palomera estará envuelto «en una gran caja» y tendrá más espacio que el planteado inicialmente por la Junta, a fin de incluir algunas de las reclamaciones presentadas por la plataforma a favor de un conservatorio digno. La imagen externa del edificio será «la de una gran caja, que intenta cerrar el mundo de la música al ruidoso mundo exterior, será una isla para la música», explican los arquitectos del proyecto Primitivo, Ara y Noa González. El edificio contará «con un módulo más», con lo que tendrá más cabinas y más aulas instrumentales de las 60 planteadas inicialmente por la Junta, que se concretarán oficialmente dentro de un mes con la presentación oficial del proyecto básico definitivo.
Vista de la zona porticada. RAMIRO.
Uno de los pasillos centrales sobre los que se organiza el interior del centro. RAMIRO .
Vista de uno de los patios. RAMIRO.
«Será un proyecto único y reconocible, una caja monocolor, para dar idea de un elemento unitario, mientras que el interior será abierto y luminoso», explican los arquitectos, que también han diseñado en León el edificio de la Tesorería General de la Seguridad Social. El diseño interior está basado en «la trama de organización romana» con dos calles o direcciones a partir de la cuales se ordena todo el espacio, «para que dé más opciones», además de garantizar un espacio «geométricamente ordenado y más funcional».
Los arquitectos destacan el acceso al edificio, que será a través de un patio arbolado y una zona porticada «que harán de enlace entre el mundo ruidoso y el interior dedicado a la música. Además, habrá una fuente, para que el sonido del agua sea la conexión entre ambos espacios», explican desde el estudio de arquitectura, para añadir que tanto el patio como el porche serán «espacios de relación», para que los alumnos y los visitantes puedan tener una zona de descanso o para intercambiar opiniones.
La acústica
El interior del edificio estará orientado hacia los patios interiores por los que entrará la luz natural y a través de los que se ordenan los espacios. «Se trata de un edificio que se vuelca hacia el interior», destaca la arquitecta Noa González, quien señala que lo más complejo del diseño ha sido el tratamiento de la acústica y la personalización de cada espacio. Tanto el suelo como los techos cuentan con materiales absorbentes —con suelo que amortigua las pisadas—, aunque aún está por definir el material con el que se dará forma a la caja que envolverá todo el edificio.
El nuevo conservatorio de León, que se levantará en La Palomera y previsiblemente estará operativo para el curso 22/23, aunque no para el inicio de curso, dispondrá de dos plantas, baja más uno, y se tratará de un «edificio bajo y compacto», aunque con posibilidades de crecer. Además del espacio que ya se ha aumentado para incluir las demandas de la plataforma, los arquitectos destacan que el proyecto cuenta «con una ventaja, la parcela, que es muy grande y que permite reservar un espacio para una posible ampliación», ya que podría crecer por la zona trasera, donde se ubicará el aparcamiento.
«Se trata de un edificio racional, ordenado y funcional, que se inserta en la trama urbana a través de la plaza, que se abre a la ciudad», precisan los arquitectos del estudio vallisoletano.