La Junta fija en 2021 el plazo tope para que la Diputación ejecute el plan Leitariegos

El último día de 2021. Es la fecha tope marcada por la Junta a la Diputación para que el proyecto de modernización y ampliación de la estación invernal Valle de Laciana-Leitariegos esté totalmente ejecutado: un pacto al que han llegado ambas partes y que la institución provincial deberá cumplir si no quiere perder la subvención de 3,5 millones de euros procedentes de los fondos para la Dinamización Económica de los Municipios Mineros, a través de la ADE, cuyo plazo inicial expiraba a finales de septiembre de este mismo año. Se trata de una ayuda fundamental para el Palacio de los Guzmanes que tiene previsto desarrollar es este espacio para el esquí un plan de 7,7 millones, con 4,2 procedentes de sus propias arcas.

En la reunión mantenida en Valladolid —en la Agencia de Desarrollo Económico—, la Diputación acudió con una hoja de ruta en la que detalló los pasos y calendario de las distintas fases de ejecución del proyecto con el objetivo de conseguir una ampliación de plazo para la subvención. Por el momento, más de dos años después de la presentación del plan, no cuenta aún ni con los proyectos redactados, ni la declaración de impacto ambiental tramitada, aspectos trascendentales para que las obras puedan comenzar en una zona azotada por el fin del carbón que reivindica alternativas económicas para su supervivencia y atajar su sangría demográfica.

En la hoja de ruta, planteada por el diputado de Desarrollo Económico, Miguel Ángel del Egido, la institución provincial relata que la redacción del proyecto ya está adjudicada y que en el plazo de diez días también lo estará la del impacto ambiental. Una vez que estos trabajos finalicen, la Diputación los remitirá al Ayuntamiento de Villablino, con previsión de que sea a lo largo del mes de mayo. Debe ser este municipio el que presente a la Junta el proyecto de declaración ambiental para que sea aprobado. Habrá un plazo para las reclamaciones y otro para su resolución, de manera, que para diciembre el plan podría contar ya con esta declaración, aunque el diputado reconoce que los plazos «están muy ajustados», teniendo en cuenta además la cita de los comicios municipales en mayo. Otro aspecto esencial, que podría demorar este trámite, tiene como protagonistas a las numerosas figuras de protección que blindan la zona, ubicada en territorio preservado a través del sello Reserva de la Biosfera.

Una vez conseguida la declaración ambiental, la Diputación ya podrá preparar la licitación de las distintas actuaciones previstas en el proyecto global para sacarlas a concurso. Las obras, entones, podrían comenzar cuando finalice la próxima temporada de esquí. El plazo para que los trabajos sean permitidos serán reducido a unos pocos meses al año por las restricciones ambientales que supone estar enclavada en uno de los corredores del oso. El plan cuenta con cinco acciones principales: adecuación y revegetación de las pistas de esquí y ampliación y mejora de la innivación artificial; sustitución del telesquí La Laguna; desplazamiento del telesquí Ferradura y el cambio del de La Moral, así como la ampliación de la balsa.