Fomento niega que haya improvisado el documento del Corredor Atlántico

El Ministerio de Fomento defiende su intervención en torno a la ampliación del Corredor Atlántico hacia el noroeste, y niega que haya improvisado en la elaboración de los documentos. Ni componenda ni credenciales limitadas a un soporte de power point, según calificaron los técnicos de la comisión de Transportes las referencias que se les habían hecho llegar en torno a la extensión del Corredor al extremo peninsular.

Ante las críticas vertidas por la Xunta de Galicia hacia el contenido de la actuación, el ente ministerial observa que «detrás de esa presentación hay una abundante documentación de alta complejidad técnica, jurídica y económica, que ha sido fruto del trabajo llevado a cabo por técnicos especializados, fundamentalmente, del Ministerio de Fomento y de Adif. No se trata, por tanto, de actuaciones improvisadas para su presentación a los medios de comunicación», matizan fuentes gubernamentales. Fomento pone también énfasis en no limitar el catálogo del proyecto a una «mera enumeración de planes y actuaciones, sino una integración coherente orientada a maximizar el rendimiento social y económico de las inversiones mediante impulso político, sentido de Corredor, funcionalidades para los clientes, objetivos, plazos y compromisos económicos concretos», responde después de una secuencia de críticas a la actuación ministerial con la puesta en escena del Plan Director.

El Ministerio de Fomento añade también observaciones sobre la acusación de que los objetivos de la ampliación del Corredor Atlántico son fruto de la ligereza. «No es un documento cerrado; se trata de un proyecto vivo, en constante evolución, como corresponde a la magnitud de la empresa a desarrollar, con más de 40.000 millones de euros de inversión en todo su conjunto, y al plazo en el que está previsto su despliegue, que es de 12 años», concreta el promotor en torno a la relación al margen con el que se debe abordar la intervención.

Y anuncia que se trabaja ahora en completar un documento sistematizador «que integre todas las actuaciones y sus principales características y que, una vez elaborado, se dará a conocer». La idea es actualizarlo de forma progresiva y periódica para incorporar los avances operados, los cambios en las circunstancias del entorno que afecten a su desarrollo, o las aportaciones de otros agentes implicados.

Frente al malestar que ha generado el debate sobre la consistencia del plan, el Ministerio de Fomento sostiene que «mantiene en este asunto una interlocución directa y constante con la Comisión Europea, al ser el órgano competente para ello y sin necesidad de intermediación ajena a ambas partes», apunta.