León adecenta el casco histórico para Semana Santa con un plan de eliminación de pintadas

Al anuncio del paso de las procesiones que llenarán las calles de ojos a partir de mañana, el casco histórico se adecenta. El Ayuntamiento de León culminará estos días, a la puerta de la Semana Santa, el plan especial de limpieza ideado para acabar con las pintadas que afean edificos públicos y privados de la ciudad antigua. La intervención pone el foco sobre 37 fachadas, 29 en el Barrio Romántico y 8 en el Húmedo, bien por el aviso de los vecinos o la inspección de los técnicos, en las que los grafitis han dejado su huella sin permiso alguno. El rastro se afanan ahora en eliminarlo los operarios municipales, antes de que los cortejos procesionales conviertan la zona en el escenario de las fiestas que mayor número de visitantes y vecinos congregan a lo largo de todo el año en la ciudad.

Imagen de una pintada en una de las fachadas de la calle Pablo Flórez, vía de entrada hacia la Catedral. RAMIRO

El plan «atiende las necesidades de mejora del patrimonio y estado del casco histórico como punto de referencia monumental y zona común de disfrute de los leoneses y turistas», como señala el concejal de Obras e Infraestructuras, Eduardo Tocino, quien incide en que «cuando se trata de pintadas ofensivas se intenta actuar de manera inmediata, con independencia del área de León que sea», mientras que en el Húmedo y el Romántico se suele concentrar la actuación en esta época para acabar con los otros grafitis. El edil del PP justifica que cada zona «tiene sus peculiaridades y al igual que en las pedanías se instalan, por ejemplo, contenedores para poda o se acondicionan caminos con zahorras o u otros materiales, en el casco antiguo, no hay caminos ni sendas, sino monumentos y calles en las que el objetivo clave es la preservación del patrimonio histórico, imagen de la ciudad».

La actuación, cuyo coste asume el consistorio sin que haya cuantificado la factura del material, obliga a que los técnicos tengan que recabar el permiso de las comunidades de vecinos. Nadie se ha negado, como cita Tocino, quien insiste en que, «por desgracia», el casco histórico «sufre importantes actos de vandalismo que suponen una falta de respeto a la convivencia de los leoneses, de su cultura, contra el patrimonio y la historia». La autorización se anota en fachadas de Pablo Flórez, Conde Rebolledo, La Rúa, Corral de San Guisán, plaza de Santo Martino, plaza del Vizconde, Puerta Castillo, Corral de Villapérez, Serranos, Juan de Arfe, San Pelayo, La Paloma, Mulhacín, Don Gutierre, plaza del Grano, Cardenal Landázuri, Cervantes, Convento, Descalzos, Fernando González Regueral, La Hoz, López Castrillón y Ordoño IV el Malo. No en todas ha sido la misma actuación, como detalla el edil, quien abunda en que en unos casos ha sido suficiente con «la hidrolimpiadora» de los servicios de limpieza, mientras que en otras «se ha tenido que pintar paños completos de alguna fachada porque estaba hecha un desastre».