TRIBUNALES
El fiscal rechaza repetir el juicio de Mariano Andrés
La familia del condenado considera que careció del derecho a una defensa adecuada
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León dejó visto para sentencia el recurso presentado por la familia del joven condenado a una pena de quince años de prisión como autor de la muerte a puñaladas de su compañero de piso, la noche del 13 de agosto de 2017. El suceso ocurrió en la avenida de Mariano Andrés ambos acababan de salir de un establecimiento de ocio nocturno cercano, donde se inició una discusión que terminó con el asesinato de la víctima a manos del agresor, que tiene sus facultades mentales perturbadas.
La familia del condenado entiende que careció de la tutela judicial efectiva, en tanto en cuanto considera que la defensa que se dispuso para él a través del turno de oficio, no fue la adecuada y le causó indefensión. El Ministerio Fiscal, por su parte, considera que el juicio se celebró con todas las garantías y que el penado dispuso de la representación letrada correspondiente como estipula la ley y que se llevó a cabo la tarea de manera adecuada.
Ahora, la sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia, con sede en Burgos, dictará sentencia para dar por cerrado el caso o determinar si corresponde atender a las reivindicaciones de la familia del joven, que propone la celebración del juicio de nuevo en la Audiencia Provincial. La vista se desarrolló en apenas quince minutos.
El fallo del Magistrado Presidente del Tribunal del Jurado que juzgó el caso bajó en dos años y medio la pena que solicitaba el Ministerio Fiscal y desoyó la propuesta de la defensa de que los quince años se cumplieran en un centro psiquiátrico.
Ahora, la familia del joven y una vez estudiada la celebración de la vista oral, propone que se repita el juicio alegando que el acusado sufrió indefensión y que no tuvo acceso a una tutela judicial efectiva.
El herido falleció tras sufrir lo que la Fiscalía calificó como «una agresión inesperada y de gran violencia, sin poder oponer defensa alguna al encontrarse con una tasa de alcohol en sangre de 2,30 gramos por litro».