El Ayuntamiento subastará los 1.300 faroles del casco histórico que cambia

No se tirarán, ni se dejarán para chatarra, como se había previsto en un principio, sino que se aprovecharán para que reporten un dinero a las arcas municipales. El Ayuntamiento de León subastará los 1.300 faroles artísticos del casco histórico que se cambiarán con el nuevo contrato de renovación del alumbrado del municipio. La venta permitirá dar una nueva vida útil al material, en el que se incluyen los brazos de fundición que los anclan a las paredes, y a su vez generar recursos, como explica el concejal responsable de Obras, Eduardo Tocino, quien abunda en que esta misma idea se intentará aplicar a las luminarias que se sustituirán en algunos parques, toda vez que se revise que están en condiciones.

La decisión se asienta ahora que la unión temporal de empresas (UTE) concesionaria, formada por OHL, Ingesán y Fermasa, ha tomado ya las riendas del servicio. Desde el pasado sábado, 1 de junio, los responsables de la empresa privada han asumido el mantenimiento de las instalaciones eléctricas, como marca el contrato, y atienden todos los avisos que se generan, tanto para arreglar averías como para sustituir equipos. El cambio ha hecho que la decena de operarios de las brigadas del consistorio se centren a partir de este momento en los edificios municipales, donde ya hay un parte de trabajos pendientes que supera el centenar de encargos.

Pese a esta toma de contacto, los trabajos de cambio de las luminarias no comenzará hasta mediados de mes. Los primeros trabajos se centrarán en las rondas de circunvalación de la ciudad, donde las lámparas son de 400 vatios y su sustitución supondrá un ahorro de consumo más relevante, lo que hará que el suministro se rebaje y la UTE consiga rendimientos más pronto. Junto con estas zonas, se intervendrá en aquellas en las que hay mayores deficiencias, como en La Lastra. Por delante, quedarán 20.014 puntos de luz por cambiar y 5 meses de trabajo, uno por debajo de los que había estipulados en el contrato, según concede Tocino, que reseña que este plazo servirá para que antes de final se año se hayan cambiado todas las luminaria y los cuadros de control y se hayan resuelto las deficiencias que existen.

El contrato compromete al Ayuntamiento de León para los próximos 10 años, con una factura de 2,078 euros por anualidad. Este pago amortizará la inversión de la empresa, que debe hacerse cargo también del coste del suministro y el mantenimiento y que sacará sus rendimientos de los ahorros de energía.