León salva a dos espías del CNI

Dos agentes del CNI incomunicados en territorio enemigo necesitan ser rescatados. Los mandos de operaciones especiales del Ejército de Tierra, del Aire y de la Armada se coordinan para llegar hasta ellos con el máximo sigilo, sin alertar al enemigo y realizar el rescate en el menor tiempo posible. Este fue el escenario que ayer se organizó en la Academia Básica del Aire en el marco del ejercicio Sofex que anualmente desarrollan estos cuerpos militares —el equivalente a los Navy Seals estadounidenses— para mejorar su integración e interoperatibilidad conjunta.

Este año, el ejercicio estaba coordinado por el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas del Aire, por lo que fueron ellos quienes escogieron la Academia Básica de La Virgen para estas pruebas en las que participan más de 250 soldados hasta el próximo martes. Con los zapadores del Aire, el Mando de Operaciones Especiales del Ejército de Tierra (los antiguos Boinas Verdes) y la Fuerza de Guerra Naval Especial, de la Armada, todos ellos coordinados bajo el Mando Conjunto de Operaciones Especiales.

Los dos supuestos agentes del CNI, en solitario y aislados, estaban perdidos en medio de las instalaciones de la Academia del Aire. La operación de rescate comenzó con el lanzamiento, de paracaidistas a 14.000 pies de altura (cuatro kilómetros). Los primeros dos equipos de operaciones especiales, los del Aire y los de la Armada, tomaron tierra y flanquearon a distancia a los dos agentes para asegurar la zona. En el último paracaídas, saltando en tándem, otro agente del CNI que podía identificarles y asegurar que las dos personas a las que se iba a rescatar no eran hostiles.

Tras este paso fundamental, entraron en acción los MOE. Ellos bajaron deslizándose por una cuerda desde un helicóptero Súper Puma que no llegó a tomar tierra para evitar ser un blanco fácil. Después, todo sucedió en unos instantes. Los tres agentes del CNI subieron rápidamente al helicóptero, con parte de los soldados, mientras los vehículos blindados Uro Vamtac entraban en escena para recoger al resto de los militares que habían intervenido en la operación de rescate a la vez que otro avión sobrevolaba la zona hostil para garantizar la seguridad del Ejército español. Un simulacro militar para que los cuerpos de operaciones especiales, los soldados de élite en España, conserven su capacidad para intervenir, como ya han hecho, en Irak o Afgnistán.