El Ibiomed coordina una red nacional de investigación para deportistas de élite

El Consejo Superior de Deportes (CSD) creó una red de investigaciones que permitirán mejorar el rendimiento en deportistas de élite y concienciar a la población acerca de los beneficios que provoca el ejercicio en la salud. Además, la red pretende potenciar la colaboración entre diferentes grupos de diversas universidades españolas, y entre ellas la Universidad de León coordina una de estas investigaciones en del Instituto de Biomedicina (Ibiomed).

Para llevar a cabo estos avances, el CSD sirve de apoyo económico para estos conjuntos, que están constituidos por entre 4 y 20 miembros. Sin embargo, según afirmó el director del Ibiomed, Javier González Gallego, el aporte económico que recibe el instituto por las investigaciones «es prácticamente nulo, variando entre las cantidades de 3.000 y 8.000 euros por grupo, dependiendo del proyecto».

Según confirma González Gallego, el objetivo de las investigaciones «se divide en dos bloques». En primer lugar, «sirve para conocer mejor los efectos del ejercicio sobre la salud en la población y trata de concienciar a la gente acerca de evitar ciertas acciones como el sedentarismo» declara. Por otra parte, sostiene que los proyectos «ayudan a entender cómo los entrenamientos mejoran el rendimiento físico en deportistas de élite desde el punto de vista experimental».

Los científicos del Ibiomed, instituto leonés reconocido por la Junta de Castilla y León, participan en tres tipos de redes de investigación. El primer tema que tratan las redes trata sobre las bases moleculares y celulares del ejercicio físico y está respaldado por la Universidad de Oviedo. Este proyecto se encarga de estudiar la causa de los cambios, a nivel celular y genético, que se producen cuando se realiza ejercicio de forma natural. También evalúa los efectos en la salud, como el hecho de curar ciertas enfermedades o analizar las consecuencias de un entrenamiento en el rendimiento deportivo, a nivel profesional y amateur. Un ejemplo de este tipo de red es la observación de diferentes piezas de una bicicleta, ya que al modificarlas, puede afectar al rendimiento de un ciclista de élite.

La segunda red aborda sobre el ejercicio físico y la salud, y está impulsada por la Universidad de Zaragoza. En este caso, las investigaciones abarcan una materia más amplia y trabajan con grupos específicos como personas mayores, niños o gente discapacitada. Esta modalidad es la más conocida ya que existe desde hace varios años. Un ejemplo de proyectos que analiza esta red es el desarrollo de programas de ejercicio físico para enfermos de esclerosis múltiple en Castilla y León. La última red que propuso el Consejo Superior de Deportes trata sobre la valoración del fitness femenino y está potenciada y coordinada por la facultad de Inef de la ULE.