Francia entregará a la etarra Anboto para juzgarla por el atentado a Cortizo

Francia entregará a la Justicia española a la etarra Soledad Iparraguirre, para que sea procesada como inductora en el asesinato del comandante Luciano Cortizo, perpetrado en León el 22 de diciembre de 1995. Por la autoría de aquel atentado en la capital leonesa fue condenado el etarra Sergio Polo a 110 años de prisión.

Soledad Iparraguirre, conocida por el apodo de Anboto, fue detenida en Francia junto a su pareja, número uno de la organización terrorista ETA, en el año 2004, y desde esa fecha cumple condena en una prisión en las proximidades de París, según informa el diario El País.  

La activista y terrorista fue condenada 20 años de prisión por más de 14 asesinatos. Muchos de esos asesinatos prescribieron al haber transcurrido más de veinte años desde que fueron perpetrados. El asesinato de Cortizo, comandante del Ejército de Tierra, no lo está, tras recibir la causa un impulso procesal, lo que paraliza la prescripción, antes de que se cumplieran las dos décadas desde el asesinato del comandante.  

Iparraguirre está procesada en España como inductora de la muerte de Cortizo, asesinado mediante el procedimiento del atentado con una bomba lapa que fue colocada bajo el asiento se su vehículo, que fue accionaba cuando circulaba por la calle Ramón y Cajal de la capital leonesa. En en atentado resultaron herida su hija y cuatro viandantes.  

Anboto fue la encargada de poner voz en la lectura del comunicado que anunciaba el fin a la banda terrorista ETA en mayo del año pasado. Además fue una de las dirigentes históricas de la banda. Una vez repatriada, la etarra va a ser puesta a disposición del Juzgado Central de Instrucción numero tres de la Audiencia Nacional, que dirige la magistrada María Tardón.  

En marzo de 2016, el tribunal de Apelación de París falló a favor de l traslado de la dirigente terrorista a España, una vez que cumpliera la pena a la que fue condenada por la Justicia francesa, previsto para 2019, según informa Europa Press. Iparraguirre tiene un hijo con uno de los últimos jefes de ETA, Mikel Antza; junto a su pareja, fueron detenidos en Francia en 2004 y condenados a 20 años de prisión; Antza fue entregado por Francia a España a principios de este año y quedó en libertad al no existir causas abiertas contra él.  

La extradición de Anboto a España fue solicitada por la Audiencia Nacional en 2015, en relación a un proceso de revisión que efectúan de forma periódica las fuerzas de seguridad del Estado en torno a los trescientos atentados y crímenes de ETA que están sin resolver; en un auto del juez Juan Pablo González, se solicitó la entrega a nuestro país.  

Muchos de esos asesinatos se encuentran prescritos; también, algunos en los que está implicada la etarra. No así el de Cortizo, tras el impulso a la causa y las investigaciones de la Guardia Civil y sus pesquisas en el sumario abierto por la desarticulación del comando Araba de ETA, en febrero de 1996, que aportó pistas sobre el atentado a Cortizo en varios registros de casa de la provincia de Guipúzcoa. En una de esas operaciones hallaron una carta de Anboto, jefa de los comandos no fichados, en los que daba instrucciones a Polo para que atentara contra Cortizo. De la carta se desprende que fue ella quien facilitó el material explosivo que se empleó en el atentado.