TRÁFICO
Sancionados 28 conductores durante la campaña contra las distracciones al volante
Siete de cada diez denuncias estuvieron motivadas por el uso del teléfono móvil
ICAL La Policía Local de León denunció a un total de 28 conductores durante el tiempo de vigencia de la campaña de vigilancia y control sobre distracciones al volante que se llevó a cabo la semana pasada en la capital leonesa y que contó con la colaboración de la Dirección General de Tráfico (DGT). La práctica totalidad de las sanciones estuvieron motivadas por la manipulación de teléfonos móviles, navegadores o reproductores de vídeo o DVD, así como por el uso de auriculares, informaron fuentes del Consistorio. De ellas, la mayor parte de las denuncias, el 71 por ciento, tuvieron que ver con el uso del teléfono móvil al volante. En segundo lugar, con el 14 por ciento, se sitúa el uso de auriculares y en tercer lugar, con el cuatro por ciento de las denuncias aparece la utilización o manipulación durante la conducción de pantallas de acceso a internet, monitores, reproductores de vídeo o DVD y navegadores. El 11 por ciento restante corresponde a otras infracciones que provocan distracción en la conducción. En total, los agentes controlaron 864 vehículos, por lo que los sancionados representan el tres por ciento. Objetivos de la campaña El principal objetivo de esta campaña, señalaron las mismas fuentes, pasaba por disuadir a los conductores de usar el teléfono móvil al volante y por hacer comprender a los peatones que, en ocasiones, la utilización del teléfono móvil hace que permanezcan ajenos a los riesgos y la importancia de desconectar el móvil mientras se conduce. Los teléfonos con sistema de manos libres, los únicos permitidos, son menos peligrosos que los otros, aunque no disminuyen todos los riesgos: distracción, señales que no se ven, mayor tiempo de reacción y maniobras sin señalizar, entre otras. Según diferentes estudios, después de un minuto y medio de hablar con el móvil, incluso con manos libres, el conductor no percibe el 40 por ciento de las señales, su velocidad media baja un 12 por ciento y el ritmo cardiaco se acelera bruscamente durante la llamada. Igualmente, los estudios constatan que la peligrosidad por un uso inadecuado de los dispositivos móviles puede llegar a ser equiparable a la conducción con exceso de alcohol. |
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