Los delegados sindicales se atrincheran en la Junta por las 35 horas

Una docena de delegados de la Federación de Servicios Públicos (FeSP) de UGT se han quedado encerrados en la Delegación Territorial de la Junta como medida de protesta contra la decisión de la Junta de no aprobar hasta el 1 de abril la reducción de jornada. Los sindicalistas se concentraron al mediodía  en el hall del edificio de la Delegaciónante la falta de acuerdo para el establecimiento de la jornada semanal de  35   horas  para los trabajadores públicos.

Según ha informado el sindicato ugetista, la protesta no sólo se ha convocado por la falta de acuerdo sino por la "actitud y ninguneo del Gobierno PP-Ciudadanos hacia los trabajadores públicos y su humillación sin parangón a los sindicatos".

Una protestas que llegan ante el recrudecimiento de las negociaciones con la Junta y el fracaso de las mismas en la reunión celebrada ayer en Valladolid.

Una situación que ha provocado que las centrales sindicales mantengan la convocatoria de huelga para los empleados públicos de mañana miércoles día 6.

Así, la nueva propuesta de la Junta para aplicar la jornada semanal de  35   horas  -perdida en 2012- a partir del próximo 31 de marzo ha sido rechazada por los sindicatos.

Acudir a los tribunales

CCOO, UGT y CSIF anunciaron hoy que estudian acudir a los tribunales por la “mala fe” y el “incumplimiento grave” de la Junta de Castilla y León en la aplicación de la jornada de 35 horas, a la vez que se mostraron confiados de que la jornada de huelga general convocada para mañana y a la que están llamados los más de 85.000 empleados públicos de la Junta, tendrá un masivo seguimiento.

Los sindicatos, que descartaron movilizarse en actos electorales del Partido Popular o de Ciudadanos, a pesar de las protestas protagonizadas hoy en Zamora en un acto de campaña de Cs en el que participó el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, también recalcaron que la Junta nunca tuvo voluntad de llegar a un acuerdo y la oferta realizada ayer sólo es una excusa para seguir dilatando el cumplimiento del acuerdo.

En una comparecencia conjunta, la secretaría autonómica de Acción Sindical de Castilla y León, Raquel Fernández, indicó que los condicionantes que propone la Junta para la aplicación de las 35 horas a partir del 31 de marzo, entre los que se incluyen la estabilidad presupuestaria, criterios de organización y estándares de calidad, “son criterios que dependen de la propia administración y no suponen ninguna garantía”.

Por su parte, la secretaria de la Federación de Sanidad de CCOO en Castilla y León, Ana Rosa Rivas, criticó que la propuesta de la Junta, ya que además de “no coincidir con lo tratado en el encuentro del lunes, sólo se trata de un documento con el que tener argumentos en marzo para un segundo incumplimiento del acuerdo firmado el pasado mes de mayo”.

Rivas también acusó a la Junta de faltar al respeto a los funcionarios y a todos los ciudadanos. “Desde la primera reunión mantenida en marzo sólo se han dedicado a entretenernos. No quieren cumplir lo firmado y lo enmascaran argumentando que la reducción de la jornada supondría un deterioro de la calidad de los servicios públicos. Saben que es una gran mentira, dado que ya se demostró con una jornada de 35 horas la calidad de los servicios no mermó”, sentenció.

Mientra tanto, el responsable de Sanidad de la Federación de Servicios Públicos de la Unión General de Trabajadores de Castilla y León Miguel Holguín, insistió en la falta de voluntad de cumplir lo firmado por parte de la Junta y lamentó de que se trata de la primera huelga general de los trabajadores públicos que sufre un gobierno autonómico.

Además, también advirtió que la huelga de mañana es un punto y seguido en la lucha por recuperar las 35 horas y aseguró que la reducción de jornada conlleva una recuperación de las plantillas, “algo que se traducirá en una mejor calidad asistencial en los hospital, reducir las listas de espera y mejorar los ratios en educación”.