La vejez de la población aumenta un 13% los ingresos neurológicos en el Hospital

Uno de cada cuatro leoneses supera los 65 años de edad y al igual que el envejecimiento de la población se ha traducido en un aumento del 30% de las visitas de los médicos de familia a domicilio, los ingresos hospitalarios de este sector han ido aumentando y ya representan el 57% de los 35.776 que se registraron.  

La principal causa para que estos usuarios queden hospitalizados en León la constituyen las enfermedades circulatorias (un 22%), pero en los últimos quince años se han disparado un 13% los ingresos por motivos neurológicos, lo que significa el doble que la media de la Comunidad, según un informe de la Sociedad Española de Neurología (SEN). El documento, Impacto de las enfermedades neurológicas en la atención hospitalaria española , determina la frecuencia y la utilización de los recursos hospitalarios que requieren estas enfermedades en el ámbito nacional, de las comunidades y de las provincias.  

En ese periodo de 15 años también se incrementaron un 6% el número de estancias hospitalarias por causas neurológicas en León, que alcanzaron las 45.011 el año pasado. El informe señala que más de una cuarta parte de los 14.585 ingresos neurológicos de Castilla y León correspondieron a pacientes de la provincia (3.874).  

«Tanto el número de ingresos como el de días de estancia hospitalaria por enfermedades neurológicas ha aumento muchísimo», señala el vocal de SEN, Juan Carlos Portilla, quien achaca al progresivo envejecimiento de la población el principal factor de riesgo para muchas de las enfermedades neurológicas que justifican esos incrementos. A su juicio, las cifras muestran «que cada vez hay más población con mayor riesgo de padecer una enfermedad neurológica».

 

 

La Gerencia del Hospital de León ya tuvo que reforzar el servicio de Geriatría hace cuatro años con un nuevo especialista para rebajar los seis meses de espera a mes y medio. Los tres geriatras del servicio reciben a 1.300 nuevos pacientes mayores al año para su evaluación, el 60% por demencias, muchas de ellas derivadas por los médicos de familia, que también requirieron consultas para analizar pérdidas de memoria y posible alzhéimer. Los especialistas realizan esas evaluaciones en coordinación con los neurólogos.  

El envejecimiento en León supone un reto sanitario para el sistema, los profesionales y las familias, que cada vez necesitan más recursos para atender las necesidades de las personas mayores, que representan el 25% de la población de León. La consulta de geriatría se abrió en 1995 y atendía a 100 pacientes, ahora ven a 3.000 personas frágiles, polimedicadas y con un deterioro funcional importante.

 

 

La Sociedad Española de Neurología calcula que para atender a estos enfermos se necesitan 5 neurólogos por cada 100.000 habitantes y entre 3 y 6 camas neurológicas por cada 100.000 habitantes.  

En el caso de Castilla y León, los pacientes requirieron en el último año 163.480 estancias en un centro hospitalario por padecer una enfermedad neurológica. Estas dolencias requieren el 7,21% del total de estancias que se producen en la Comunidad; el 6,71% del total de estancias hospitalarias de los hombres y el 7,78% de las estancias hospitalarias de las mujeres. Respecto a hace 15 años ha aumentado un 2,1% el número de estancias hospitalarias por enfermedad neurológica. Entre todas, en la provincia destaca el ictus, cuyos aliados son la hipertensión, el colesterol, la diabetes y las enfermedades cardíacas.  

La principal causa de muerte entre los mayores está relacionada con enfermedades del aparato circulatorio, seguida del cáncer (tumores), y en tercer lugar, a distancia, las enfermedades respiratorias. El informe destaca, no obstante, el aumento de la mortalidad por enfermedades mentales y nerviosas en los últimos tres lustros.

 

El ictus es la tercera enfermedad con más ingresos en el Caule: 700

 Una enfermedad neurológica, el ictus, es tras la insuficiencia cardiaca y la neumonía, la tercera enfermedad que más ingresos hospitalarios generó en el último año: setecientos. Se convierte así en la primera causa de discapacidad, la segunda de demencia, tras el alzhéimer, y el primer motivo por el que mueren las mujeres, lo que da una idea de la importancia sanitaria de esta enfermedad. Además, el ictus es, tras la esquizofrenia, la segunda dolencia que más número de días de ingreso requiere, y otra enfermedad neurológica, la demencia, es la segunda que más media de días de ingreso supone, 50,3 días de estancia media.

También dentro de la casuística neurológica, los traumas cerebrales, la epilepsia o la esclerosis múltiple destacan como enfermedades que demandan más recursos hospitalarios. El paciente neurológico que requiere de ingreso hospitalario permanece una media de 11,8 días, según el informe del SEN. El ictus genera 13,5 días de estancia media; la esclerosis múltiple, 9,3 días; los traumas cerebrales, 7,9 días; y la epilepsia, 6,3, Tanto la incidencia del ictus como del alzhéimer seguirá aumentando con el progresivo envejecimiento de la población, según la Sociedad Española de Neurología, «por lo que se hace necesaria una revisión de los recursos hospitalarios con los que actualmente cuenta Neurología, para poder dar respuesta a esta demanda cada vez más creciente», estiman. Las personas mayores suponen el 45,3% de todas las altas hospitalarias y presentan estancias más largas que el resto de la población, según un estudio del Csic. Una alta hospitalaria se produce por curación, mejoría, fallecimiento, traslado o alta voluntaria).

 

Los principales problemas que llevan a los pacientes al médico son circulatorios

Del total de altas de personas mayores, las enfermedades circulatorias (20,2%), respiratorias (16,6%), digestivas (12,1%) y neoplasias (11,1%) son las causas más frecuentes de asistencia hospitalaria. Le siguen en importancia las lesiones, las enfermedades genitourinarias y las del sistema osteomuscular.

Las tasas de morbilidad hospitalaria aumentan con la edad, que se asocia con peores estados de salud y cronicidad.

También son más elevadas en hombres que en mujeres excepto en edades de 15 a44 años, en que las tasas femeninas más elevadas están asociadas al embarazo y el parto. Más de la mitad de todas las estancias causadas en el hospital son de población mayor y el porcentaje sigue aumentando. La senectud no solo afecta al aumento de los requerimientos médicos de los pacientes leoneses, sino que golpea directamente también a la plantilla del personal sanitario.

La jubilación en la próxima década de más de 860 facultativos de los 1.876 que están en activo en la provincia dibuja un futuro poco halagüeño sobre la capacidad de cuidados a la población, y se agrava por la falta de profesionales para cubrir algunas plazas, sobre todo en medicina de familia y en el medio rural. El deterioro según avanza la edad puede responder a cambios en los hábitos alimentarios (mayor ingesta de grasas y azúcares) y al descenso de la actividad física.