Julio Arredondo | Nuevo abad de la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz
«Recuperamos la paz tras tres años muy convulsos»
Julio Arredondo Fernández tomará posesión mañana domingo (12.00 horas, Iglesia de San Martín) de su cargo como nuevo abad de la Real Cofradía de Minerva y la Santa Vera Cruz, para el bienio 2020/2021.
—¿Cuál es su vinculación a la cofradía?
—Era papón de otras cofradías desde 1988 pero mi hijo quería avanzar más y terminamos siendo de JHS, Angustias y Minerva. Siempre he pujado La Verónica. Fui bracero del Descendimiento y de la Vera Cruz. En la abadía de José Antonio Cabañeros se decidió recomponer la Piedad, nos la restauró Agustín Rilova y me encantó. Por votación salió sacar esta imagen en procesión y estoy orgulloso.
—¿Esperaba llegar a ser seise algún día?
—La primera propuesta la rechacé, pero luego lo reconsideré. Fui aceptado y hasta hoy. Proyectos hay muchos, pero hace falta dinero. Lo que me propongo es consolidar lo que tenemos.
—Llega a la abadía en un año que va a ser de dos Semanas Santas ¿no?
—La expresión se le ocurrió a Susana Travesí cuando presentamos el Encuentro Nacional de Cofradías, que se celebrará en septiembre. Es una suerte enorme ser abad este año. Estoy muy implicado, estuve en Elche y espero que las cofradías se vuelquen.
Cambios
«La nueva configuración de El Encuentro beneficia mucho a Angustias y también a nosotros»
—¿El Museo de la Semana Santa salvará las reticencias?
—Seguro. Hay quien no se lo cree y que sea diocesano retrae un poco más. No vamos a ser capaces de llenarlo nunca y si Patrimonio pide una calidad mínima, será más difícil. Pero cabemos todos y se enriquecen mutuamente las dos partes, pero costará un tiempo. Va a ser un atractivo turístico aunque lo mejor que tenemos está al culto.
—¿Les favorece el cambio de configuración de la procesión de Los Pasos?
—Sin duda. Minerva sale beneficiada pero Angustias más. La mayor parte de los braceros de JHS lo son también de las otras dos cofradías.
—¿Cómo está Minerva en la actualidad?
Matices
«Que el Museo de Semana Santa sea diocesano va a generar reticencias, pero se van a poder salvar»
—La cofradía está muy serena, después de tres años convulsos. La Junta de Seises está cohesionada y el futuro a corto plazo se avecina tranquilo, que es como debe de ser. No estamos aquí para apagar fuegos. Tenemos un proyecto de cofradía acorde a una entidad religiosa.
—¿Tiene relevo Minerva para los próximos años?
—La edad máxima de los seises está recogida en los estatutos. En otras cofradías eres abad en siete años. En la nuestra transcurren casi 20 años. Por circunstancias hay gente que va cayendo antes.
—¿Qué sensación le ofrece el conjunto de la Semana Santa de León?
—Los relevos generacionales se están resintiendo. Navetas e inciensarios hay y braceros de primer año también. Pero luego se van, aunque vuelven cuando llega la etapa de los 30 años.
—Se están volcando con la acción social ¿verdad?
—Tenemos un grupo que hay que retocar, pero se está haciendo un voluntariado importante. Los relevos nos exigen reforzarlo. Un día al año tenemos el fin de semana solidario, con recogida de juguetes el sábado y de alimentos el domingo. El párroco nos ha dicho que hemos recogido víveres para seis meses.
—¿Y juguetes?
—También, aunque San Martín es una parroquia con muy pocos niños. Aún así fue un éxito y los repartimos entre La Chantría y Las Ventas.
—¿Está agradecido a...?
—... a los grupos de montaje, al de adorno floral y a todas las personas que componen la cofradía.