Andbank expone a los empresarios cómo evitar quiebras patrimoniales
El banco organiza con la Cámara de Comercio, CEL y Fele varias jornadas informativas
El próximo jueves se celebrará una nueva jornada con empresarios de la provincia.
«Una planificación patrimonial óptima no tiene en cuenta sólo las necesidades de inversión, sino todos los aspectos que afectan al patrimonio». Y esto es especialmente importante en el caso de las familias propietarias de negocios y empresas, pero necesario en todos los casos. La planificación financiera, el análisis de la estructura del patrimonio, la previsión de jubilación, impuestos y sucesión, son algunos de los aspectos tratados en la jornada «Cómo evitar las quiebras familiares», organizada por Andbank con la Cámara de Comercio, el Círculo Empresarial Leonés (CEL) y la Federación Leonesa de Empresarios (Fele). Un encuentro que se repetirá el próximo jueves, y que tiene como vocación mantenerse en el tiempo «hasta llegar a todas las empresas de la provincia», señala María Jesús Soto, directora de Andbank León. Es la primera vez que el banco organiza esta actividad en España, y será un referente para otras provincias.
En el encuentro de ayer con empresarios participó Marcelino Blanco, director del departamento de Planificación Patrimonial de Andbank. que recordó a los empresarios participantes que en los últimos años, después de la crisis, se han producido grandes cambios en el entorno legal, fiscal y financiero, que «requieren un seguimiento constante de las estrategias de planificación patrimonial, con el fin de preservar el patrimonio y el futuro de las empresas, pero sobre todo de las familias».
Blanco señaló que, según las declaraciones del Impuesto del Patrimonio en Castilla y León, un 45% de los bienes son mobiliarios en participación en entidades no negociadas, un 23% en inversión colectiva, un 15% en depósitos y un 14,5% en acciones en entidades negociadas. Por lo que se refiere a los riesgos que afectan a las empresas familiares, destacó que «una inadecuada prevención puede llevar a la aparición de conflictos. Y una inadecuada separación del patrimonio a la desaparición del patrimonio y de la empresa».
En cuestiones de empresa familiar el origen de los conflictos surge fundamentalmente de la sucesión, la ampliación del círculo de personas y el reparto de la propiedad, la entrada de terceros, las crisis familiares y el enfrentamiento entre los criterios familiares y los empresariales. Por eso son necesarios los protocolos de pactos de familias y ordenación de las relaciones entre la familia y la empresa, así como una planificación sucesoria.
En el caso de las familias, el objetivo es preservar, y en el mejor de los casos rentabilizar, el patrimonio familiar, así como asegurar el futuro. Por eso es necesario planificar la sucesión y conseguir una estructura fiscal eficiente del patrimonio.
Soto explicó ante los empresarios que muchos expertos consideran que el sistema «no ha aprendido mucho de las lecciones de la crisis. Por eso es necesario contar con un asesoramiento que proteja las finanzas y los asuntos patrimoniales, al margen de los riesgos consustanciales a los negocios y las empresas».