El Consejo de Cuentas chequeará la ciberseguridad de los datos personales

¿Están seguros nuestros datos personales en poder de los ayuntamientos o bien están sujetos a vulnerabilidades? Estas dos preguntas se las ha formulado el Consejo de Cuentas de Castilla y León y pretende responderlas dentro de su plan de fiscalizaciones para este año. De hecho, analizar el nivel de seguridad de los datos sensibles de las personas que manejan las entidades locales es el aspecto más novedoso de la hoja de ruta que este organismo se ha trazado para el actual ejercicio.

Cuando se aprueben definitivamente las directrices técnicas de este plan se definirá con precisión cómo se va calibrar si todos esos datos sobre los ciudadanos de cualquier municipio están bien protegidos o si por el contrario las administraciones locales tienen fugas preocupantes en cuanto a la privacidad de los mismos. En esas directrides también se seleccionarán los ayuntamientos de la Comunidad que van a ser objeto de esa revisión; un listado entre los que se encuentran varios de la provincia de León, según confirmó el Consejo de Cuentas que preside el leonés Mario Amilivia.

La decisión de esta entidad de embarcarse en una investigación de este calado viene motivado por el boom de internet en los últimos años. Todos nuestros datos están ahí, en la red y en la red todo está conectado. Y eso siempre significa riesgos y brechas. En definitiva vulnerabilidades. «De lo que se trata es de ver como están funcionando, si las entidades locales llevan a cabo controles de ciberseguridad para comprobar si ante un posible ataque los datos de las personas están seguros. En definiva se trata de ver si os ayuntamientos tienen controles básicos y efectivos en cibersegbuirdad frente a las ciberamenazas.»,se explica desde la oficina del Consejo de Cuentas.

Esta fiscalización, en la que Mario Amilivia está especialmente interesado, es totalmente novedosa. De hecho es la primera vez que se aborda este campo de actuación. El trabajo de campo se quiere llevar a cabo en el mayor número posible de ayuntamientos, pero hasta que no se aborden y definan las directrices técnicas en el ámbito de Castilla y León no se determinarán el número de ayuntamientos donde el Consejo de Cuentas se lanzará a bucear en su ciberseguridad.

En todo caso, el plan de actuación pretende someter a revisión a todos los sistemas de información de la entidad auditada, como la contabilidad, facturación, cobro de tributos, domiciliación de cuentas bancarias de los ciudadanos. A nadie se le escapa que que en todos estos apartados hay datos sensibles (que deben ser protegidos) y los riesgos de internet están ahí con los hackers siempre acechando. En su conjunto, Castilla y León tiene 2.248 ayuntamientos, de los que 211 se encuentran en la provincia de León.

El Consejo de Cuentas de Castilla y León ya tiene bien perfilada su hoja de ruta para el 2020. En ella, León tiene su espacio y la entidad que preside Mario Amilivia tiene en su particular mira la inspección de la recaudación de la Diputación Provincial, el control de las cuentas del Ayuntamiento de León y de la Universidad. En su Plan de Fiscalizaciones para el ejercicio actual, este organismo abordará el análisis comparativo de la eficacia y eficiencia de la gestión recaudatoria de la Diputación de León y el resto de las corporaciones provinciales, así como la fiscalización de los Servicios de Asistencia Técnica de cada una de ellas para comprobar de qué manera incide su actividad en la rendición de cuentas de las entidades locales; en el caso de la provincia leonesa 211 ayuntamientos y 1.232 juntas vecinales.

Las Cortes de Castilla y León aprobaron semanas atrás el programa anual de fiscalizaciones a realizar por este órgano de control externo. Un plan que incluye un total de 17 informes a los que se suman otros tantos en marcha en la actualidad correspondientes a planes anteriores, y que llevan a una importante carga de trabajo a la institución propia con sede en Palencia, señaló.

Otros de los informes contemplados en la agenda de este año por el Consejo de Cuentas es el que analizará la situación económico financiera de la Universidad de León y sus entes dependientes, que son varios. En lo que se refiere a la Universidad, el campus leonés será el tercero de la Comunidad en ser supervisado, tras los de Valladolid y Salamanca. Básicamente se trata de comprobar los indicadores presupuestarios en relación a ingresos y gastos, prestación de servicios, verificar su liquidez y deuda.