La plataforma de locales del Húmedo propone demoler el mercado del Conde

La plataforma de dueños de locales del Húmedo, agrupada bajo la denominación de Afectados por la Zona Acústicamente Saturada en la ciudad de León (Afezas), da una vuelta más a sus propuestas para el casco histórico. Sin olvidar la reivindicación principal de eliminar la normativa de control de ruidos, con el fin de que puedan arrendar sus propiedades para la apertura de más bares, el colectivo aboga ahora por «la demolición y construcción de un nuevo mercado de abastos» en la plaza del Conde Luna «con 2 plantas».

Al margen por completo del plan del Ayuntamiento de León para reformar las instalaciones del mercado y configurar una agrupación de vendedores que las gestione, que está pendiente de que avancen los pasos administrativos, la plataforma plantea un proyecto alternativo. Su idea pasa por eliminar la edificación actual y construir una nueva en la que cambie por completo el concepto. El inmueble reservaría la planta «principal y aceras aledañas dedicada en exclusiva a la venta de productos de cercanía», mientras que «la otra», que podría ir en el subterráneo, se abriría «generosa a que una marca de primera línea de alimentación haga su negocio». «Evidentemente, los locales cercanos se revitalizarán, renacerá el comercio ahora derruido y, por la propia inercia de toda esta actividad, se atraerá no sólo al público cercano, que es mucho y ayuno de servicios, sino también al aledaño», exponen desde la agrupación de dueños de locales de la ciudad antigua.

El colectivo de rentistas insiste en que «se debe acometer un plan drástico de actualización del barrio, y del resto de León, en consecuencia», pero en el que el casco histórico haga de «avanzadilla de una futura ciudad más viva y, a su vez, de una provincia con peso, que promueva inversiones». «Lo tenemos todo, pero nos falta lo importante: voluntad política y acción popular/empresarial: estadistas», señala desde Afezas, que agrupa a 35 dueños de 28 locales ubicados en la zona antigua.

El planteamiento que promueven desde la plataforma marca que «la juventud, si es estimulada con rentas simbólicas, desarrollará de forma física nuevas e inimaginables actividades, llenando de vida la zona». El colectivo abunda en que de esta forma se creará, «en el mismo centro de la ciudad, un núcleo activo y diverso: peatonal, de esparcimiento, compras y, hasta es posible, que marcas de todo tipo tomen la zona como réplica de su casa madre».

La exposición del plan confluye en el razonamiento de que creen que «ha llegado la hora de retirar la caótica Ley ZAS de que tan dañinos recuerdos y repercusiones económicas han causado». Frente a la plataforma contra el ruido y los vecinos que piden que incluso se amplíen los espacios de restricción, Afezas defiende que la normativa «ha ayudado a la desaparición del entramado comercial y vecinal en provecho de clanes licenciados administrativamente», en referencia a los propietarios de bares y pubs cuyas licencias cotizan al alza al no poder abrirse más. «Se inaugura un tiempo nuevo», auguran desde la plataforma, que pide acabar con «las mesas de estudios cansinos y sin recorrido» y reclama «planes creíbles, documentados y dotados económicamente». «Sí al estadista. Que renazca la iniciativa, que se autorregule el alquiler», sintetizan.