«Buscan dinero pero también que perdamos confianza en el servicio»
No ha habido un impacto mucho más apabullante que en otras crisis, a criterio del subdirector de Incibe «porque el Covid no es nacional, es mundial, y no es técnico sino sanitario». La información debe de llegar por el canal más seguro «y ahí las empresas deben recurrir a la fuente oficial». Es importante la transformación digital «y ahí es factible que tengamos que teletrabajar» y destacó que frente a un incidente «es importante la resiliencia».
Cada vez que aparece un malware tipo Wannacry «comprobamos que buscan información, dinero y activos para causar un perjuicio que nos haga perder la confianza en un servicio. Lo que pasa es que el Covid es una crisis física, no cibernética. La traslación paralela al mundo cibernético es posterior. La ciberdelincuencia aprovecha una situación para su lucro personal. En 2019 de 110.000 incidentes, el 30% eran fraudes. Ahora veremos que habrá un 35% de fraude electrónico que podremos asimilar al virus», señaló el subdirector.
«La desinformación deliberada es mayor porque la situación es diferente porque los hacktivistas han lanzado mucho bulo y mucha estafa». Hay que parametrizar bien porque unos niveles de seguridad adecuados permiten aumentar la productividad. El 100% de tu tiempo se dedica a tu tarea y no a responder preguntas en el despacho».
Para saber si un móvil es seguro, lo mejor es «hacer vigilancia digital del perfil de forma activa para que solo personas de confianza tengan acceso a la información. Un ‘who I am’ es ideal para eso. Se necesita un antivirus y un antimalware y tratar de no usar wi-fis publicas para hacer transacciones bancarias».
ISK4 es un canal dedicado a instruir a los niños contra las malas prácticas «pero la educación es fundamental y se necesita una vigilancia constante. Hay que dar a los niños herramientas para saber responder en Internet».
Anonymous es una forma de activismo cibernético «que hemos visto desde el referéndum ilegal de Cataluña hasta nuestros días. Antes no teníamos tanta incidencia pero ahora identificamos los casos en los que actúan por Internet para plantear amenazas. En las penúltimas elecciones estaban más pendientes de Assange que de las cuestiones de las elecciones. Sin embargo en el 10-N hubo más elementos de desinformación».