Una llamada telefónica entre cada enfermo «in situ» para espaciar las consultas
Para poder desinfectar entre una consulta presencial y otra, los médicos de familia recurren a espaciar esas citas in situ con el colchón de una llamada para atender a otro paciente a través del teléfono. «Intentamos que no se produzca una avalancha», reconoce la médico de familia de Eras de Renueva, Mercedes García de Celis, quien explica que «todo lo que se pueda resolver de forma telefónica se está realizando, aunque no somos teleoperadores y nuestro trabajo no es de teleoperador, así que tenemos que ir viendo cada vez a más pacientes, tocarles, auscultarles, mirarles, sentirles... La prudencia nos hace ir despacio, pero ya hemos aumentado de un tercio a la mitad las citas presenciales». La idea es mantener esa ratio 50-50 durante el verano e ir allanando el camino para recuperar las 9.500 citas presenciales de antaño.