León se queda sin enfermeras en la bolsa de empleo por su fuga a otras autonomías

León se ha quedado sin enfermeras en las bolsas de empleo. Ya fue complicado encontrar a profesionales del sector para la labor de rastreadoras de los contactos de los contagiados de Covid-19 y ahora el sistema sanitario se encuentra en jaque para cubrir bajas, incidencias y permisos este verano.

El sindicato de Enfermería Satse denuncia que detrás de ese vaciamiento se encuentra la fuga de muchas trabajadoras a otras autonomías. «Las malas condiciones laborales y retributivas que ofrecen Sacyl y Servicios Sociales a los profesionales están suponiendo que estos departamentos no encuentren ahora enfermeras para cubrir puestos de trabajo este verano en la provincia».

Recuerdan que desgraciadamente los pronósticos efectuados por el sindicato «se están cumpliendo», ya que Satse «lleva meses avisando a Sacyl y a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades (de quien depende Servicios Sociales) de que las condiciones tan precarias están haciendo que las enfermeras se marchen a trabajar a otras comunidades».

Indican que Castilla y León es de las 17 autonomías (incluidas Ceuta y Melilla) que peor retribuye a sus enfermeras, «y esta situación ha empeorado en el último año al pasar del puesto 15 al último lugar».

Sin sustitutos

Satse constata que al no encontrar sustitutos, Sacyl y Servicios Sociales «están ya denegando permisos y vacaciones, lo que supone empeorar aún más las condiciones de estos profesionales, que ven cómo aumenta su carga de trabajo al tener que asumir el de los compañeros que no son sustituidos, resintiéndose la asistencia».

Como ejemplo señalan que en el Hospital del Bierzo el aumento de la carga asistencial ha pasado de 12 a 18 pacientes por enfermera en los turnos de tarde y noche, mientras el Hospital de León tiene «en suspenso los permisos hasta el 30 de septiembre al no poder cubrir las necesidades de personal».

«Esta situación se hace especialmente gravosa en las circunstancias actuales, recién salidos de una pandemia en la que los enfermeros han tenido que asumir unas enormes cargas de trabajo, realizar un tremendo esfuerzo y poner en riesgo su vida en muchas ocasiones, lo que les ha dejado demasiado exhaustos como para que ahora no haya suficiente personal enfermero para afrontar la asistencia sanitaria y sociosanitaria», señalan.

Satse insiste en que las enfermeras vienen de una situación de estrés y exige la mejora de esas condiciones laborales y retributivas si se quiere garantizar una asistencia de calidad.