Juzgados
Unicaja controlaba las decisiones de Ceiss un año antes de tener la gestión del banco
El reparto de propiedades de Caja España Duero se hizo ya pensando en los intereses de la entidad, no de la obra social
Unicaja controlaba todas las actuaciones que llevaba a cabo Banco Ceiss (el negocio financiero de Caja España Duero) desde que realizó una oferta de canje para hacerse con la entidad, un año antes de que la adquisición se materializase en marzo de 2014 y pasase a convertirse en filial del banco malagueño.
Así lo reconocieron ayer ante el juez de Primera Instancia número 9 tanto el actual presidente de Unicaja, Manuel Azuaga, como el ex presidente de Banco Ceiss Evaristo del Canto.
Lo que implica que las escrituras notariales que en febrero y abril de 2014 que traspasaron al banco inmuebles que debían ser propiedad de la fundación heredera de la obra social, que aún no se había constituido, se realizaron ya bajo el control de Unicaja.
Con y sin cargas
Sin embargo Azuaga señaló ayer ante el juez que no recordaba esas decisiones en concreto.
Según la representación de la Fundación Obra Social de Castilla y León (Fundos), que presentó la demanda contra Unicaja para conseguir que le reintegre un importante patrimonio inmobiliario y artístico, tanto Azuaga como el ex presidente del banco andaluz y actual presidente de la Fundación Unicaja, Braulio Medel (que finalmente prestó declaración desde el juzgado de Sevilla) se aferran a que el reparto de bienes entre el banco y la fundación que heredó las obras sociales se fijó en la escritura de segregación que el consejo de administración y la asamblea general de Caja España Duero aprobaron a finales de 2011.
Y que ellos no tuvieron control ni sobre este reparto ni sobre las modificaciones que se realizaron con posterioridad (pese a que la segunda de ellas se realizó ya con Azuaga como presidente de Banco Ceiss).
Un listado polémico
La defensa de Fundos destaca que entre las conclusiones de los testimonios prestados ayer ante el juez, que se prolongaron durante toda la mañana y parte de la tarde, llama la atención el hecho de que ya desde la preparación de la escritura de segregación de 2011 el reparto primó los intereses del banco frente a los de la obra social.
Lo que se justifica por el hecho de que la mayor parte de quienes formaban parte del equipo de la caja fueran a pasar directamente a desarrollar su actividad en el banco.
Así, aunque en el documento se especifica que la fórmula de división de los bienes es que pasan al banco los que tienen relación con la actividad financiera y a la fundación los adscritos a las obras sociales (una fórmula generalizada en todas las segregaciones que se llevaron a cabo en las cajas de ahorro españolas en esos años), en Caja España Duero «apareció a última hora un listado de bienes», que ninguno de los directivos ha recordado por quién fue elaborado, que ya reservaba parte del patrimonio de la obra social para traspasarlo al banco.
En todo caso, la demanda y los informes presentados inciden en que está claro cuál era la intención de la escritura de segregación y cuáles eran los bienes que tenían actividad social, y no financiera. Aunque un buen número de ellos hayan pasado a ser propiedad primero de Ceiss y luego de Unicaja.
En otros asuntos
Tanto Azuaga como Medel señalaron en sus declaraciones que su preocupación durante el proceso de rescate y adquisición de Ceiss estaba en las dificultades financieras de la entidad, y en las condiciones de adquisición; y no en el patrimonio de sus obras sociales.
Y que no tienen conocimiento de cómo ni por qué se hicieron las modificaciones de la segregación.
Azuaga destacó que en aquellos meses su actividad se centraba en negociar con el Banco de España, las autoridades europeas y el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria; mientras que Medel explicó que no conocía la dimensión de la obra social ni sus propiedades porque lo que le preocupaba entonces eran los problemas relacionados con la deuda subordinada, los preferentistas y los niveles de morosidad del banco.
Listado de bienes
En la primera de las tres jornadas previstas para las declaraciones de los testigos en el caso de Fundos contra Unicaja comparecieron ante el juez José María de la Vega (actualmente director general de Operaciones y Tecnología de Unicaja Banco y que fue director general de Caja España Duero y posteriormente de Banco Ceiss); Evaristo del Canto, Manuel Azuaga, Braulio Medel, Luis Miguel Antolín, José Manuel Fernández Corral, Rosario Matilla y Carlos Rivera.
Hoy está previsto que presten declaración los miembros de la comisión gestora que elaboró los estatutos (y revisó el inventario de bienes) de la Fundación Obra Social de Castilla y León, entre ellos el actual Procurador del Común en Castilla y León, Tomás Quintana.