En crisis
Las dudas por las restricciones hunden la ocupación del turismo rural en un 90%
Aletur echa en cara a las administraciones que las vacilaciones en las medidas arruinaron el puente de Todos los Santos
Tradicionalmente, los puentes de otoño son temporada alta para los aproximadamente 450 establecimientos de turismo rural que funcionan en León.
El de Todos los Santos que llega el próximo fin de semana es de los subrayados en rojo por el sector porque —al menos hasta ahora— garantizaba una ocupación cercana al cien por cien.
Sin embargo, la imagen que muestra el de este año es triste: refleja casas vacías y una sucesión de reservas canceladas.
Críticas
El secretario de la Asociación Leonesa de Turismo Rural (Aletur), Jesús del Río, cifra en menos de un 10% la ocupación que tienen ahora mismo. Y la perspectiva es que esta exigua cifra se mantenga durante todo el puente.
«La ocupación es bajísima pero el principal problema que tenemos es la incertidumbre en todo lo relacionado con las limitaciones por la pandemia. Estamos viendo que hoy se abre, pasado mañana se cierra; hoy hay toque de queda mañana no; un día se habla de cierre perimetral y al día siguiente se dice que no...así no se puede trabajar con seguridad», sentenció del Río. A su juicio, esta situación genera temor entre los usuarios y acelera las cancelaciones como ya les está sucediendo en estos momentos.
Tanto Jesús del Río como el vicepresidente de Aletur, José Manuel Álvarez, coincidieron en reprochar a las administraciones las dudas que han transmitido con las medidas para combatir la expansión de la epidemia. «Entendemos perfectamente que estamos viviendo una emergencia sanitaria y que hay que tomar medidas, pero las administraciones lo deben poner blanco o negro porque los tonos grises no nos dejan funcionar. Estamos sufriendo cancelaciones y perdiendo clientes a lo tonto», dijo Álvarez gráficamente.
Segunda ola
Lo cierto es que las casas de turismo rural reconocen que «hay interés» por viajar en el Puente de Todos los Santos pero que l todas estas incertidumbres han conseguido que muchos se echen para atrás y decidan finalmente no viajar. Los principales mercados del turismo rural en la provincia están en Madrid y en otras zonas de la propia Comunidad de Castilla y León. «Te llaman, pero acto seguido lo primero que preguntan es si podrían cancelar», advierten.
De hecho, no fue hasta ayer cuando las Comunidades de Madrid, Castilla y León y Castilla-La Mancha anunciaron que quedarán cerradas de manera perimetral hasta el 9 de noviembre para evitar desplazamientos en el puente de Todos Los Santos.
Las pocas reservas con las que cuenta ahora mismo el sector del turismo rural en León son mayoritariamente de viajeros de la provincia y sobre todo de la propia capital. El perfil corresponde con personas o grupos que buscan un destino cercano —no más de treinta kilómetros— para no alejarse en exceso de su lugar de residencia habitual.
El hecho de que la vecina Comunidad de Asturias ya esté cerrada ha provocado un pequeño efecto rebote. Viajeros que tenían pensado ir allí están llamando a establecimientos de turismo rural leoneses como posible plan alternativo. «Pero lo normal es que en la muchos de las casas de turismo rural ahora haya o muy pocas o cero reservas», advirtieron.