El PP propone eliminar el peaje de la AP-6, pero sólo a usuarios segovianos

La suerte de la rebajas, exenciones y bonificaciones que afectan a los peajes no termina de llegar a León. Ni los presupuestos ni las enmiendas que motivan tienen en cuenta a la AP-66 y a la AP-71, las dos vías de pago leonesas en las que se mantiene la vela del agravio; si antes se descolgó de esta compañía solidaria del noroeste abandonado y periférico la AP-9 (que gracias a una inyección de 55 millones de euros va a permitir prescindir del pago en la mayor parte de los tramos que comunica en el litoral atlántico gallego) ahora se barruntan cambios para la AP-6, esa barrera de tributo que obliga a cualquier leonés, a todo el flanco noroeste, que quiere acceder a la capital de España por vial de alta capacidad. El PP acaba de anunciar una enmienda a los Presupuesto del Estado para liberar de gravamen el peaje de la autopista; pero la prebenda será exclusiva para los segovianos.

El promotor de esta iniciativa (que los medios de comunicación castellanos ya señalan con el carácter de preferente para la dirección nacional del Partido Popular) resulta ser el senador Javier Maroto (que es representante en la cámara Alta por la cuota autonómica). La enmienda para lograr agraciar a los usuarios de Segovia que transitan a Madrid por la misma vía de comunicación que se ve obligado a utilizar el noroeste español, supone en coste de cinco millones de euros.

El senador Maroto puntualizó así el objetivo de la enmienda, que debe de presentar con fecha tope hoy, según el calendario de tramitación de las cuentas del Estado: «El PP no actúa como otros partidos; nosotros tratamos de que no se descuadre el presupuesto; como la concesión no se puede tocar solicitamos que se bonifique el cien por cien a determinados usuarios; creemos que será una manera de incentivar el asentamiento de población en la provincia de Segovia». «Queremos que se beneficien todos los segovianos y aquellos que acuden de una manera recurrente a Segovia desde las distintas localidades que forman el eje con Madrid», extendió el senador del PP.

La vida de la concesión del peaje de la AP-6, que guillotina la expansión del norte en las conexiones radiales con la capital del Estado español se alarga hasta dentro de nueve años, en noviembre de 2029; la tasa de esta vía compite en lo alto del ránking de las más caras por kilómetro de España con las leonesas AP-66 y AP-71 y eleva el grado de presión fiscal que ejerce como corsé del desarrollo para estos territorios periféricos que están llamadas a comunicar: el corredor central de la capital leonesas, estrangulado por las barreras en Villadangos y Hospital y el paso de montaña hacia Asturias, en la única opción de circular por estructuras de alta capacidad en la conexión asturleonesa.

Este que lidera el PP es el segundo movimiento de entidad que se realiza a en torno a los peajes de cara al próximo ejercicio económico.

Hace más de dos décadas que los usuarios de las autopistas de pago de León, que suponen casi un tercio de toda la red de alta capacidad de la provincia leonesa, esperan una gracia de este alcance; una exención, una bonificación gradual, más allá del intríngulis heredado de los gobiernos que hace una década idearon una opción de rebaja en el peaje de la Magdalena a partir del quinto paso por barrera en el mismo mes. Un remiendo en las expectativas de los usuarios a los que se llamó a las urnas con la promesa de que se iba a rescatar el peaje.