La Junta deja en el aire el puente de diciembre y la hostelería se resigna

La reunión de la Junta con la hostelería, comercios y gimnasios para pasar revistar a la situación epidemiológica y avanzar la hoja de ruta que marque la desescalada en estos sectores concluyó con puntos de vista bien dispares. El vicepresidente, Francisco Igea, no despejó la incertidumbre sobre la reapertura de los establecimientos para aprovechar el puente de la Constitución del próximo mes de diciembre, del 4 al 8, pero sí se mostró convencido de una vuelta a la actividad en esas fechas si continúan bajando los contagios.

«Nosotros prevemos que a partir el 3 de diciembre podremos retirar las restricciones de una inmensa mayoría del territorio. pero eso va a depender de la evolución epidemiológica. Les hemos explicado que la evolución es buena y que cuando descendamos por debajo de 400 casos por 100.000 habitantes se van a retirar estas restricciones. Incluso hay provincias que van a entrar ya en niveles inferiores a la alerta 4 y eso nos va a permitir reiniciar la actividad en gran parte de esos sectores», manifestó Igea.

«Las cosas van bien y la actividad se retomará de forma progresiva. Con respecto al próximo puente, y a la espera de tomar una decisión conjunta, se han tomado ya acuerdos por parte de muchas comunidades autónomas que hacen prever que lo más probable es que se mantenga el cierre perimetral. Pero nosotros esperaremos a esa decisión conjunta entes de anunciar nuestra postura», añadió.

Sin embargo, tras reunirse con el vicepresidente de la Junta y otros consejeros del Ejecutivo autonómico, el presidente de la Confederación de Hostelería y Turismo de Castilla y León, Ángel Blasco, acentuó que los representantes del sector salieron de este encuentro «desanimados» porque esperaban una propuesta de desescalada y recibieron «todo lo contrario». «Ni se les pasa por la cabeza abrir», recalcó.

Reabrir terrazas

Para cuando bajen los contagios a unos niveles aceptables, el Ejecutivo está estudiando otras acciones, como el cierre perimetral por provincias y nuevas normas como la restricción de un tercio del aforo o abrir sólo las terrazas, como ya han comenzado a hacer otras autonomías.

Según Blasco, Igea apeló con detalle a los datos de incidencia del coronavirus en la comunidad y «no son nada optimistas».

El plazo de las últimas medidas restrictivas que establecen el cierre de bares y restaurantes finaliza el próximo 3 de diciembre pero, por lo comunicado ayer se prevé una nueva prórroga. Blasco reconoció que salían de la reunión telemática «desanimados» «desanimados» porque esperaban una propuesta de desescalada y recibieron «todo lo contrario».Por el contrario, Igea planteó un escenario en el que la mayoría de las provincias pueden reiniciar la actividad de los sectores mencionados: «La actividad se va a poder retomar de forma progresiva, de acuerdo a los niveles de alerta pactados en el Consejo Interterritorial», resumió.

Sobre las ayudas directas que reivindicaron los hosteleros, Igea se ha remitido al Plan de Choque Nacional que esperan acordar con el Gobierno central y los ayuntamientos para que repartan las aportaciones en función del nivel de inversiones: 50% del Gobierno, 35% la Junta y 15% los ayuntamientos.