El presupuesto de la Universidad se recorta en nueve millones de euros

El rector, Ángel Penas, informó ayer a la Junta de Gobierno de la Universidad sobre el recurso presentado contra la segunda disposición transitoria de la Ley de Universidades, referida al claustro universitario, al rector y a la aprogación de los Estatutos de las Universidades y que obliga a la institución académica a constituir un nuevo claustro conforme a la nueva normativa en un plazo no superior a los seis meses a partir de la aprobación de la ley. La Junta de Gobierno tamibén procedió al nombramiento de Miguel Ferrero García como director del Secretariado de Institutos Universitarios y Asociaciones de Investigación, y de Tomás Vigal García como director del Laboratorio de Técnicas Instrumentales. Este órgano acordó además la supresión del Secretariado de Relacoines con las fundaciones universitarias, al haber asumido sus competencias la Vicegerencia de Asuntos Generales y Poyo a Órganos de Gobienro, y el cambio de denominación de la actual Oficina de Análisis, Gestión y Difusión de I+D, que se transformará en Secretariado de Gestión de Investigación (Segi). Entre otros asuntos de interés, la Universidad dio el viso bueno ayer a tres cursos instrumentales, en los que podrán participar más de cien alumnos, para lo que se contará con un presupuesto de 12.329 euros. El Vicerrectorado de Ordenación Académica y Profesorado también vio aprobadas varias propuestas para impartir varios cursos relacionados con el medio ambiente y con el mundo de la economía y las finanzas. La Junta de Gobierno aprobó, asimismo, el reglamento para la concesión de la insignia de la Escuela Universitaria de Ingeniería Minera, que pretende disciplinar la distinción con carácter general, así como el procedimiento, las formalidades, normas de uso y privación de la citada insignia. Los servicios a la escuela, a la Universidad o los méritos académicos fundamentarán esta distinción honorífica, cuya concesión corresponderá a la Junta de la Escuela. Nuevas pruebas Entre otras novedades relacionadas con normativas y reglamentos, la Universidad dio el visto bueno a la nueva regulación del acceso a la licenciatura de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y en sus diferentes apartados contempla las pruebas físicas específicas y el baremo de movilidad articular, la fuerza explosiva de los miembros, la agilidad, la resistencia aeróbica y la adaptación al medio acuático. En todo caso, la Universidad tiene previsto que para el próximo curso, el acceso al segundo ciclo reserve un 3% de las plazas para discapacitados y otro tanto para deportistas de alto nivel. La Universidad también aprobó el nuevo calendario escolar, que será puesto a disposición de los alumnos en los centros administrativos de cada facultad. La Junta conoció, igualmente, el informe de la comisión de evaluación del profesorado.