La entidad emisora justifica la reestructuración en la «pérdida de operatividad y contenido»
El Banco de España cerrará sucursales y dejará sólo una por autonomía
El Banco de España ha iniciado una negociación con los sindicatos, en el marco del diálogo de su convenio, que culminará a fin de año con un plan de cie
La mayor parte de las 52 sucursales del Banco de España, una por provincia, desaparecerán en breve, según las intenciones dadas a conocer por la entidad emisora a los representantes de sus trabajadores. Entre estas sucursales que seguramente desparecerán se encuentra la de León, ubicada en la calle Ordoño II; aunque fuentes de la institución prefieren no confirmar los cierres hasta haber llegado a un acuerdo con los sindicatos. Fuentes sindicales indicaron que la intención del Banco de España es mantener una sucursal por autonomía; o bien dejar en funcionamiento sólo las catorce oficinas que cuentan con un centro de tratamiento de billetes. Estos sistemas se encuentran en las sedes del Banco de España de Barcelona, Valencia, Sevilla, Bilbao, Madrid, Palma de Mallorca, Oviedo, Málaga, Murcia, A Coruña, Las Palmas, Tenerife, Valladolid y Alicante. La entidad emisora explicó que su integración en el Sistema Europeo de Bancos Centrales ha forzado una serie de cambios organizativos y funcionales para su modernización. En lo que se refiere a la red de sucursales, recuerdan que «a lo largo de los últimos año se ha producido una sensible disminución de su actividad derivada de factores tales como la mejora de las comunicaciones y el desarrollo de las nuevas tecnologías de la información, a lo que habría que añadir la pérdida de operatividad y contenido». Todas estas circunstancias hacen necesario concentrar en un número menor de sucursales los servicios que actualmente presta la red del Banco, y «al mismo tiempo iniciar un proceso de modernización de la red resultante». La entidad emisora señala que ha iniciado la negociación con los sindicatos para alcanzar un acuerdo «sobre la base de que el proceso afecte al menor número posible de empleados y que la reestructuración se resuelva a través de medidas que minimicen los efectos negativos, evitando en lo posible la extinción de contratos». Actualmente el Banco de España cuenta con 3.080 empleados, de los que 825 están destinados a las sucursales, con una media de diez por oficina.