Diario de León

La provincia será la última en perder su oficina en la comunidad, que contará sólo con la sede de Valladolid

La sucursal del Banco de España cerrará el 31 de diciembre del 2004

La sucursal del Banco de España en León cerrará definitivamente el 31 de diciembre del 2004, según el acuerdo alcanzado por la entidad e

La sucursal de León cerrará en la tercera fase de plan de reducción de oficinas del Banco de España

La sucursal de León cerrará en la tercera fase de plan de reducción de oficinas del Banco de España

Publicado por
María Jesús Muñiz Redacción - LEÓN.
León

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Ávila, Palencia, Segovia y Soria serán las primeras provincias de la comunidad en cerrar sus sucursales del Banco de España, dentro del plan de reducción y modernización que lleva a cabo la entidad emisora como consecuencia de la pérdida de competencias, en manos ahora del Banco Central Europeo. Burgos, Salamanca y Zamora cerrarán sus puertas un año después; y por último León lo hará el último día del año 2004. En total serán treinta las sucursales que el Banco de España clausurará dentro de este plan, que le dejará sólo con 22 oficinas repartidas por todo el país. Valladolid será la única que permanecerá abierta en Castilla y León. El acuerdo fue alcanzado con la aprobación de los miembros del comité de empresa de los sindicatos Satbe, Asebe y Aieca (inspectores); y con la oposición de UGT y CC.OO. (que no están de acuerdo con el plan de prejubilaciones). Prejubilaciones Según los términos pactados, el cierre afectará a unos 300 empleados, de los que 200 podrán acogerse a las prejubilaciones si han cumplido los 50 años. En el caso de trabajadores que permanezcan en las oficinas abiertas, el plan de prejubilaciones se aplicará a partir de los 55 años. Los prejubilados cobrarán «casi» el cien por cien del salario, con una revalorización anual del 2%; si bien los detalles del compromiso se conocerán con más detalle a partir de la próxima semana. El Banco de España cuenta actualmente con 3.080 empleados, de los que 825 están destinados en las 49 oficinas que actualmente están abiertas (las capitales de provincia, Ceuta, Melilla y Santiago de Compostela). El resto trabaja en las oficinas centrales, en Madrid. Los trabajadores que no estén en edad de prejubilarse o no quieran acogerse a la medida tendrán que trasladarse a otra sucursal o a la central madrileña; donde irán obligatoriamente los directores y jefes de sucursales afectados por los cierres. Aquellos empleados que opten por abandonar la entidad percibirán una cantidad equivalente a veinte días por año trabajado, con el máximo de una anualidad. En el primer plan planteado por el Banco de España al comité de empresa se contemplaba también el cierre de la sucursal de Alicante, aunque finalmente ésta se mantendrá abierta. A partir de enero del 2005 el Banco de España contará con una sucursal operativa en cada comunidad autónoma, salvo en Andalucía (que tendrá oficina en Sevilla y Málaga); País Vasco (en Bilbao y San Sebastián); Canarias (Las Palmas y Tenerife) y Comunidad Valenciana (Valencia y Alicante). Serán 23 las oficinas en funcionamiento.

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