Ayer fueron abiertas las plicas del concurso para las obras que deberían haber comenzado hace un año
La rehabilitación del área de Puerta Castillo atrae a nueve empresas
Un total de nueve empresas concurren a la adjudicación de las obras de peatonalización de la segunda fase del Camino de Santiago urbano, cuya ac
En la primera quincena de septiembre el Ayuntamiento decidirá qué empresa realizará las obras de peatonalización de la segunda fase del Camino de Santiago urbano, una que vez el arquitecto municipal responsable de supervisar el proyecto, Miguel Chaguaceda, emita el informe técnico correspondiente que avale la opción elegida. La adjudicación definitiva deberá entonces ser ratificada por la Comisión de Gobierno. De acuerdo a los plazos, los trabajos comenzarán en octubre con un periodo de ejecución de quince meses, por lo que no podrán ser inugurados hasta finales del 2003. Ayer, el concejal de Hacienda y alcalde en funciones, Julio César Rodrigo de Santiago, presidió la apertura de las plicas, que contó también con la presencia de otros miembros del equipo de gobierno. En total son nueve las empresas que aspiran a realizar estas obras. Se trata de las firmas Alcuba, la ute Puentes y Calzadas-Tuconsa, Volconsa, Teconsa, Martínez Núñez, Begar, Necso, Ferrovial y la ute Sufi-Corsán/Corvián. Todas ellas han presentado una oferta económica inferior al presupuesto inicial aprobado en la licitación del concurso, fijado en casi 2,4 millones de euros. Por su parte, las propuestas oscilan entre los cerca de 2,3 millones de euros de la más cara y los poco más de dos de la más barata. El 50% de estos trabajos serán financiados por el Estado a través del «1% Cultural», mientras que el Ayuntamiento se hará cargo del otro 50% en distintas anualidades. La institución municipal, no obstante, está aún pendiente de que la Junta confirme la cuantía de la subvención solicitada para esta obra a través del programa de impulso a entornos comerciales. Los trabajos, que deberían haber comenzado hace un año, se ha retrasado por problemas burocráticos, sobre todo, porque la comisión mixta del «1% Cultural» tardó meses en cambiar la denominación de la financiación que aportará a este proyecto de León, pasando de considerarla una inversión y fijándola finalmente como subvención. Este trámite permitió al Ayuntamiento licitar el proyecto directamente. La actuación comprende la rehabilitación de las plazas Puerta Castillo y Santo Martino y gran parte del barrio de Santa Marina, muy deteriorado.