Amilivia achaca la polémica a la precampaña electoral y cree que es un culebrón de verano
El alcalde de León, Mario Amilivia, atribuyó a la proximidad de las elecciones municipales la polémica generada a raíz del proyecto de reforma de una casa representativa de la arquitectura popular de principio del siglo pasado y que, en su opinión, «se trata de un asunto politizado» y de un «culebrón de verano». Amilivia defendió, en declaraciones a los periodistas, la intención del Ayuntamiento leonés de «garantizar la conservación» de este inmueble, cuyo proyecto de rehabilitación, autorizado por el Consistorio, prevé su desmontaje y restauración de sus piezas para reutilizarlas en su reconstrucción. Por este motivo, restó trascendencia a las críticas provenientes desde el PSOE y la plataforma vecinal que se opone al derribo del edificio, que situó «en el contexto del juego político propio del curso preelectoral en el que nos encontramos». «Nosotros -en referencia al Partido Popular- continuaremos con nuestra gestión ordinaria, garantizando para León un futuro mucho mejor y los demás intentarán demostrar que no somos la gente que tiene que estar al frente de las instituciones, porque esto es un juego político», sentenció Amilivia. El regidor leonés insistió en la determinación del Ayuntamiento de adoptar «todas las medidas provisionales y definitivas para que esta casa siga siendo la que es y para que la Plaza del Grano -en la que está ubicada el citado edificio- también siga siendo la que es». El candidato socialista a la Alcaldía, Francisco Fernández, fue de nuevo blanco de las críticas de Amilivia. En opinión del regidor, su contrincante del PSOE habla sin tener suficientes elementos de juicio sobre este asunto, después de que Fernández criticase la falta de presupuesto del área municipal de Patrimonio.