El proyecto Re Urban Mobil pretende recuperar para la población joven los cascos históricos
León, entre las seis ciudades de la UE elegidas para renovar zonas antiguas
León ha sido seleccionada junto con otras cinco ciudades centroeuropeas e italianas como zona para experimentar la recuperación poblacional de cascos ant
León ha sido la ciudad antigua más pequeña de las seis seleccionadas por la UE para el programa Re Urban Mobil. El resto, todas las cuales cuentan con una población de un cuarto de millón a casi un millón de habitantes, son Leipzig (Alemania) Liubliana (Eslovenia), Gracovia (Polonia), Brno (República Checa) y Bolonia (Italia). Como entidades asociadas al proyecto figuran otras siete universidades e institutos de urbanismo europeos, entre otros de Inglaterra, Eslovenia, Polonia y Alemania. El plazo de desarrollo de este proyecto piloto va desde el próximo mes de octubre hasta marzo del 2005, con un presupuesto global de 2,5 millones de euros para las seis ciudades antes citadas en forma de subvenciones del V Programa Marco de Investigación y Desarrollo. Una cantidad similar deberá ser aportada por los ayuntamientos beneficiarios con el fin de cofinanciar el programa al 50%. Según el concejal de Urbanismo, Cecilio Vallejo, el Ayuntamiento de León recibió esta semana la oferta de participar en el proyecto y «ya ha contestado afirmativamente, comprometiéndose a aportar los fondos que proporcionalmente le corresponden». Recuperar la población Según Vallejo, la UE pretende ensayar en estas ciudades la recuperación de cascos históricos altamente degradados, bien por el abandono de sus edificios o bien por la fuga de la población joven, lo que, a menudo, los convierte en auténticos guettos frente a la expansión de las ciudades en modernas barriadas de la periferia. En este sentido se recuerda que el centro antiguo de León padece, junto al abandono de muchos de sus inmuebles, un creciente envejecimiento de su población, más de un tercio de la cual supera los cincuenta años y se limita a sobrevivir en inmuebles de renta antigua. El progresivo despoblamiento del barrio se acentúa también con la desaparición de las pequeñas empresas del comercio tradicional, que antaño fueron la base económica de la zona, para derivar hacia el «monocultivo» de bares y establecimientos de hostelería como única actividad económica. Precisamente este hecho, con el correspondiente problema de ruidos, alteraciones del orden público durante la noche y las madrugadas del fin de semana, está acelerando la despoblación del casco antiguo leonés. El ensayo que se realizará en León y en las otras ciudades de la UE y países candidatos empezará por la realización de estudios socioeconómicos sobre el potencial de crecimiento y reurbanización de cada una de ellas, analizando las causas de su deterioro en las últimas décadas y proponiendo también soluciones o remedios «a la medida». El Ayuntamiento ha intentado ya revitalizar algunas calles por propia iniciativa y en solitario ofertando pequeños locales para venta y talleres de artesanía, no siempre con el éxito esperado.