Sanidad
Las obras para ampliar Urgencias avanzan sin que se haya adjudicado la segunda fase
La reforma permitirá ganar 400 metros cuadrados más a un servicio que gestiona el 60% de los ingresos hospitalarios
Con la carpintería exterior, la fontanería, los gases medicinales y las telecomunicaciones listas, la demandada ampliación del servicio de Urgencias hospitalarias de León avanza ya a buen ritmo tras superar varios imprevistos y su primera fase de medio millón de euros estará lista, previsiblemente, antes de la primavera, según confirman fuentes sanitarias. Una primera etapa licitada en casi medio millón que debe completarse con una segunda fase de 600.000 euros, pero que la gerencia de Sacyl aún no ha adjudicado. Encadenar unas labores con las siguientes sería crucial para concluir en verano la mejora de esta gran puerta de entrada del 60% de los ingresos hospitalarios, donde se atienden a 140.000 personas cada año.
La obra se inició el pasado 29 de junio y debía estar finalizada en otoño, pero varios obstáculos hoy solventados dilataron el plazo para rematar estos primeros trabajos. Entre ellos, fue necesario desviar una tubería del gas y buscar una alternativa a una pared de carga. A mediados de este mismo mes se concluirá el muro cortina y poco después se perfilará la conexión de la zona nueva con la vieja.
Trabajos de 1,1 millones
La primera fase se licitó en medio millón para construir el cuerpo exterior y continúa con otra de 600.000 euros
La reforma de Urgencias sirve para incrementar un 15% el espacio de este servicio, que crecerá desde los 2.785 metros cuadrados actuales a 3.128 m2. Lo más curioso de la ampliación de esta zona vital del Complejo Asistencial Universitario de León (Caule) es que se realiza ganando 343 m2 del exterior del gigantesco edificio sanitario, que posee una superficie construida de 126.000 m2. Una pastilla adosada que ya es visible y falta acristalar.
En esa nueva zona que antes ocupaban los soportales para la circulación y aparcamiento de las ambulancias se situará, en la segunda fase, la nueva sala de espera para las consultas y cuatro de ellas, la de enfermería, urgencias, ojos/ORL y psiquiatría, además de un área de tratamientos breves.
La pastilla adosada al edificio hospitalario para ampliar urgencias ya es visible. FERNANDO OTERO
El nuevo cuerpo del edificio se conecta con las instalaciones actuales mediante dos pasos, y con una puerta de evacuación directa al exterior. También se observa ya el futuro pasillo longitudinal desde el que se accede a las diferentes consultas, y a los pasos de unión con el resto del edificio.
Los trabajos ayudarán a que la plantilla de 350 personas (45 de ellos médicos y 100 enfermeros) trabajen con mayor organización para poder atender a los pacientes, unos 350 de media al día y con mayor intimidad, lo que se espera que redunde en disminuir los tiempos de espera. El último informe del Defensor del Paciente señala que a veces la lista para triar en este servicio acumula 40 personas, «lo que supone no prever la gravedad hasta pasada una hora». La ampliación pretende reducir esas demoras.