Tribunales
La autopsia del cadáver de Dawry no está lista un año después del crimen
La instructora apremia al Instituto de Medicina Legal, que espera informes de Toxicología
La jueza de Instrucción 2 ha dictado una providencia en la que insta al Instituto de Medicina Legal de León a explicar por qué a punto de cumplirse un año del crimen de Villavente, la autopsia completa del cadáver del dominicano Dawry Vilorio Almonte, no ha sido incorporada a los autos todavía. Los forenses de León están a la espera de una serie de informes del Instituto Nacional de Toxicología, que acumula un notable retraso por los efectos de la pandemia.
La instructora de la causa (que ya fue responsable de la abierta por el asesinato de Isabel Carrasco) depende de ese informe para poder abrir la fase de presentación de los escritos de acusación y defensa.
Quince personas comparecen en condición de investigadas en la fase final de la instrucción, mayoritariamente de procedencia española, sudamericana y un búlgaro. Se les acusa de tomar parte en la muerte violenta de un joven de nacionalidad dominicana, asesinado tras recibir dos disparos, de cuya autoría se acusa a un amigo de la infancia de la misma nacionalidad. Es el único de los cuatro sospechosos que han estado en prisión aún privado de libertad en la actualidad, recluido en el Centro Penitenciario Provincial de Villahierro.
A la espera
Los informes iniciales están listos, pero falta todavía que lleguen los análisis de Madrid
El próximo día 25 de febrero se cumplirá un año de la muerte de la víctima, cuyo cadáver apareció en un descampado de Villavante dos días después, con dos orificios de bala. La Guardia Civil sospecha que se trató de un acto de venganza, aunque las versiones que dan los protagonistas son dispares. La de los investigadores refiere que el supuesto autor de los hechos barruntaba que el fallecido estaba relacionado con un robo con violencia en casa de su madre. Los familiares del fallecido rechazan de pleno esa opción y aseguran que nunca estuvo «metido en líos».
Uno de los testigos condujo el vehículo que desplazó a todos los implicados hasta el lugar en el que ocurrió la muerte de la víctima y ofreció la Guardia Civil y en sede judicial un relato de los hechos coincidente con los indicios obtenidos a través de las dirigencias prácticas en la instrucción.
Los investigados no niegan haberse desplazado en la tarde del 25 de febrero en coche y haber sido recogidos por el supuesto autor material del crimen y su conductor. Declaran que fue el principal imputado quien después de mantener unas palabras con la víctima en el lugar del homicidio además de con sus acompañantes, decidió matarlo.
Fundamental
Parece clave el testimonio de un vecino de la zona que escuchó los disparos y aportó descripciones
De la investigación y de las declaraciones de todos los implicados se descarta interés de cualquiera de ellos en facilitar la ejecución del delito, como que tampoco tuvieron conocimiento de la intención real del cabecilla de la trama en dar muerte a la víctima. Los detenidos fueron escuchados en sede judicial y no tienen antecedentes penales por hechos delictivos. Todos refieren que fueron amenazados por el autor de los disparos y ya sabían lo que les podía ocurrir a ellos o a sus familias.
Aún siendo conocedores de que el autor material se desplazaba con todos ellos a un lugar retirado a fin de aclarar lo ocurrido con el robo con violencia, en ningún caso se refiere por el principal testigo, cuyo testimonio fue determinante para la detención de los demás investigados, que conociera que el supuesto autor de la muerte portaba un arma cuando se dirigía al lugar del delito.
Se considera clave el testimonio de un vecino de la zona que escuchó los disparos y cuya declaración podría hacer luz en lo ocurrido aquella tarde. Es la única persona que ha dado un relato «neutral» y que no forma parte de ninguno de los dos grupos investigados.