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El centro penitenciario recibirá un incremento eventual de personal con 75 funcionarios nuevos

La cárcel de León abrirá, a partir de noviembre, otros cuatro módulos

El Centro Penitenciario de León recibirá en fechas próximas a setenta y cinco nuevos funcionarios de prisiones. La llegada de la dotación de personal

Cárcel de Villahierro, en Mansilla, una de las dos que forman el Centro Penitenciario de León

Publicado por
L. Urdiales Redacción - LEÓN.
León

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Setenta y cinco funcionarios, de los que han aprobado la oposición convocada por Instituciones Penitenciarias, incrementarán temporalmente el personal del Centro Penitenciario de León, que cuenta ahora con 258 trabajadores. La incorporación de los nuevos funcionarios requiere de un periodo de prácticas que se llevará a cabo mediante un curso teórico práctico, que durará quince días, y se impartirá durante dos semanas en la prisión leonesa. Instituciones Penitenciarias asignarán a una parte de esos funcionarios al centro de reclusos de Villahierro, en Mansilla, mientras que el resto recibirá destino laboral en otras prisiones del país. La llegada de la nueva dotación de personal coincidirá en tiempo con el proceso de entrada en funcionamiento de otros cuatro módulos en la cárcel leonesa. El centro de reclusión tiene ahora actividad en seis módulos, sobre catorce totales. La apertura de los cuatro siguientes se producirá de forma progresiva, según prevé la dirección del centro. La celeridad depende del número definitivo de funcionarios que se asignen al centro una vez que el grupo de prácticas concluya el periodo de incorporación laboral. El mismo aumento de la plantilla de trabajadores en el Centro Penitenciario de León, en la capital y en Mansilla de las Mulas, causará un aumento en la población de reclusos, que ha crecido con dos centenares de ingresos desde el pasado mes de mayo y que se cifra hoy en 575 internos. El director del centro, Alberto Fidalgo, precisó que tras este aumento de reclusos no se han detectado un aumento de la conflictividad, al menos cualitativamente. «Siempre hay conflictos entre los reclusos, pero con el aumento del número de internos no se observa que hayan crecido en cuanto al carácter de esos hechos», comentó Fidalgo. El Centro Penitenciario de León, en concreto la cárcel de Villahierro, podrá admitir a un millar de internos en régimen ordinario, si se completan todas las celdas que hay en cada módulo. La población reclusa se duplicaría en el caso de que cada una de esas celdas fuera ocupada por dos internos. El crecimiento de presos en la cárcel de Mansilla podría resultar porcentual al incremento de personal que se espera en ese centro para noviembre.