Efectos de la pandemia
León registró 31.217 bajas laborales por covid desde el estado de alarma
Solo en Valladolid, con 44.720 prestaciones pagadas, hubo más casos dentro de la Comunidad
La Seguridad Social ha tramitado en León 31.217 prestaciones por incapacidad temporal derivada del covid. La mayoría, 17.143, corresponden a personas que han tenido que permanecer aisladas por contacto estrecho con un positivo. El resto, 14.074, son de «infectados» por coronavirus, según los datos que ayer compartió el ministerio que dirige José Luis Escrivá.
Solo Valladolid anotó más casos dentro de la Comunidad. La capital castellana registró hasta finales de febrero 44.720 bajas covid. En Burgos hubo 30.558. Por detrás aparecen Salamanca (25.230), Palencia (15.131), Segovia (13.972), Ávila (10.957), Zamora (10.433) y Soria (8.422).
En España la factura que ha tenido que pagar el Gobierno por este concepto asciende a unos 1.800 millones de euros para cubrir a 3,77 millones de trabajadores que tuvieron que quedarse en casa como consecuencia del covid. Las personas que se han acogido a una baja por este motivo se ausentaron de su puesto de trabajo durante más de 19 días (19,43 días) en el caso de contagio y durante 12,61 días en el caso de aislamiento.
Por provincias, el mayor número de bajas por incapacidad temporal por contagio de covid se dio en Madrid (239.805) y Barcelona (184.564). Por detrás le siguen Valencia (67.092), Murcia (50.430) y Alicante (42.219).
El gasto se dispara
El Estado ha movilizado unos 1.800 millones hasta el momento para pagar 3,77 millones de bajas
La cifra más alta de bajas por aislamiento la anotó igualmente en Madrid (464.072), seguida de Barcelona (365.184), Valencia (148.623), Vizcaya (93.907), Murcia (85.611) y Almería (83.961).
Donde menos incidencia hubo, en el caso de los positivos, fue en Ceuta (900), Melilla (1.304), Soria (3.724) y Lugo (3.976). Por su parte, el número de bajas por aislamiento más reducido se produjo en Ceuta (4.202), Melilla (4.710), Soria (4.698) y Zamora (6.197). Coincide con los territorios donde menos población activa hay o donde el desempleo está muy por encima de la media.
«La asimilación de la baja covid a accidente de trabajo establece que la prestación para los trabajadores sea del 75 por ciento de su base reguladora desde el día siguiente al de la baja en el trabajo, en lugar del 60 por ciento de la base reguladora desde el cuarto día de la baja hasta el vigésimo inclusive, y del 75 por ciento desde el día 21 en adelante que se reconoce para quienes piden la baja por enfermedad común», explicó la Seguridad Social en un comunicado.
Asimismo, la Administración asume el coste de esta prestación desde el primer día, mientras que en la baja común lo hace a partir del día 15. La protección seguirá activa hasta que no se doblegue por completo al virus y se reduzca su impacto sobre el mercado laboral. A ese desembolso de 1.800 millones hay que sumar también el gasto derivado de los ertes, que estarán en vigor al menos hasta el 31 de mayo, del paro, que se ha disparado en la provincia, del cese de actividad para los autónomos y del resto de subsidios que paga el Estado para garantizar el escudo social.