Laboral
Unión institucional para que Ovejero garantice la actividad y el empleo
Ayuntamiento y Diputación apoyan a la plantilla y piden una solución al dueño de la empresa
El Ayuntamiento y la Diputación de León mostraron ayer a través de sendos comunicados su apoyo a los doscientos trabajadores de Laboratorios Ovejero —ochenta directos— que arrastran diez mensualidades sin cobrar. Eduardo Morán recordó al respecto que «se trata de una compañía señera en el sector farmacéutico y veterinario y una de las responsables de que León sea un referente nacional en este área de actividad».
El máximo responsable de la administración asentada en el Palacio de los Guzmanes apeló a la responsabilidad de los agentes implicados en el proceso de reestructuración de la compañía «para que lleguen a una solución satisfactoria con el objetivo de mantener la actividad».
Lamentó también que estas circunstancias estén afectando a la situación económica de los trabajadores y sus familias y abogó por «reconducir» este conflicto «por la vía de unas condiciones adecuadas para seguir desempeñando su labor».
«Es evidente que Laboratorios Ovejero ha logrado en su campo un prestigio y una posición que le permite afrontar el futuro con optimismo, por lo que desde la Diputación pedimos que se pongan todos los medios para despejar los escollos que ahora lo impiden», concluyó Eduardo Morán.
Nuevo escenario
Mientras, el alcalde José Antonio Diez recordó que esta compañía «es algo más que una empresa, una referencia en la investigación, el desarrollo farmacéutico y, por supuesto, el empleo en la ciudad de León».
De esta forma mostró «su preocupación ante las noticias que se conocen día a día y que afectan «a la estabilidad del empleo actual y para la continuidad del proyecto».
Diez defendió que «durante décadas, la empresa ha desarrollado programas de investigación y producción que han significado la identificación de León con avances importantes en sanidad animal y/o producción farmacéutica».
Además, añadió que se encuentra «en una posición desde la que han contribuido a la consolidación del polo biofarmacéutico de la ciudad, con una apuesta por la investigación, el desarrollo y la innovación en disciplinas como la biotecnología, que le han permitido alcanzar una posición de liderazgo en campos como la inmunoterapia».
En este sentido, quiso mostrar «el respaldo absoluto a los trabajadores y la petición a los responsables del laboratorio para que den continuidad a la actividad y el empleo en las instalaciones» y reiteró «su profunda preocupación por la angustiosa situación económica y social de la empresa y, muy especialmente, de los trabajadores y sus familias».
Por último, instó a la parte empresarial «a que lo antes posible suscriba los acuerdos necesarios para propiciar la estabilidad del empleo y de la producción industrial dentro de la provincia, así como a dar una respuesta satisfactoria a las demandas de los trabajadores de respeto y cumplimiento de sus condiciones laborales y su estabilidad en el empleo».
Labiana mantiene su apuesta
En este sentido, el Grupo Labiana sigue apostando firmemente por el proyecto industrial de Laboratorios Ovejero que inició el pasado mes de febrero con su propuesta de adquisición de la industria. Ayer anunció que cuando se ejecute la compra trasladará su sede social a León.
Explicaron, en un comunicado, que desde que arrancaron las negociaciones han estado trabajando junto al resto de las partes implicadas, para fijar las bases que garantizan la continuidad de la fábrica. «Sin embargo, este ilusionante proceso se está viendo dificultado y gravemente perjudicado por determinadas decisiones unilaterales del accionista mayoritario y responsable de Laboratorios Ovejero», insistieron. Al mismo tiempo recordaron que pusieron cerca de dos millones de euros antes de que Juan Pablo Ovejero rompiera con ellos para negociar con Zendal.