El PSOE se queda sin mayoría en el Ildefe tras el relevo de Susana Travesí

El reparto no replicaba la proporcionalidad de la representación institucional. Pero, al comienzo del mandato, en el Pleno de organización, el equipo de gobierno se garantizó en el Instituto Leonés de Desarrollo Económico, Formación y Empleo (Ildefe) un control que no cuadraba con los resultados electorales. Sin necesidad de apoyo alguno, los cinco consejeros del PSOE les permitían adoptar cualquier acuerdo frente a los tres del PP y uno de Ciudadanos. Esta mayoría fue la que le permitió en un primer momento a Susana Travesí aprobar el nombramiento de su compañero de despacho jurídico como gerente del organismo 100% municipal, incluso pese a la abstención de uno de los miembros de su grupo político. Ahora, el escándalo que acabó con la dimisión de la concejala redunda el restablecimiento del equilibrio de fuerzas, después de que su asiento lo ocupe ya el edil de la UPL Enrique Valdeón.

La entrada del concejal leonesista hace que a partir de este momento el PSOE necesite al menos un voto para sacar adelante las propuesta en el instituto, en el que descansan las principales estrategias de formación y empleo, además de la gestión del plan de recuperación del talento: uno de los proyectos estrella del equipo de gobierno. La nueva configuración de fuerzas será clave para decidir la fórmula para la elección del nuevo gerente del Ildefe, una vez que el anterior director se jubiló con el inicio del mes de junio. Pese a que el alcalde, José Antonio Diez, ha intentado en medio de la polémica de las últimas semanas quitar importancia a la necesidad de garantizar un relevo al frente del organismo, amparado en que no se trata de un asunto que le «preocupe a los ciudadanos», el consejo de administración deberá definir cómo se cubre la plaza.

En ningún caso se resolverá por designación directa, como quería Travesí para colocar a su compañero de despacho jurídico, escudada en que se trata de un puesto de libre designación en el que debe primar la confianza. Lejos de esta interpretación, que chocaba incluso con la advertencia de irregularidad legales defendida por varios de sus compañeros y el resto de la oposición, la elección se ajustará a un proceso de selección en el que se guarden los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad que se exigen para una sociedad que, pese a su naturaleza mercantil, tiene un accionariado 100% municipal y consideración de sector público. Esta filosofía fue la que defendió el socialista Carmelo Alonso. El concejal de Hacienda y Empleo, que fue quien se abstuvo en la votación del nombramiento a dedo ejecutado por Travesí, afronta ahora la presidencia del Ildefe con el reto de resolver el escándalo dentro de un procedimiento abierto. En esa idea coinciden también el PP, Ciudadanos y la UPL. Sin uno de ellos, el PSOE ya no puede hacer lo que quiera.