La despoblación y un mercado laboral sin activos alejan la salida de la crisis

La sangría demográfica que asfixia a León y la fragilidad del mercado laboral, con la segunda tasa de actividad más baja de España, alejan la recuperación tras la crisis desatada por la pandemia. No obstante, la provincia fue, junto a Burgos y Zamora, la que mejor aguantó de la Comunidad los efectos derivados del covid, según se desprende del último Observatorio Económico, relativo al primer trimestre del año, que ayer presentó el Colegio de Economistas y que coloca a León en el segundo puesto de la clasificación que elaboran los expertos.

De las cuarenta variables analizadas respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, 26 están en la media autonómica o por encima, aunque en prácticamente todos los indicadores la lectura es negativa, más allá de que su evolución haya sido mejor que la registrada en el resto de territorios, que partían con ventaja.

De hecho, el informe insiste en que la despoblación es uno de los principales problemas estructurales que condicionan la reactivación económica y que trasciende, además, al mercado laboral. De los 456.724 habitantes censados, el 27,29% tiene más de 65 años. Ese envejecimiento, y la ausencia de un tejido industrial potente, dejan en León más pensionistas, parados y subsidiados que personas en condiciones de trabajar.

Es alarmante que la tasa de actividad siga por debajo del cincuenta por ciento. En abril se situó en el 49,04%, lo que supone un ligero aumento respecto al trimestre anterior (48,51%), pero baja un 3,3% en la comparación interanual. La de Castilla y León está casi cuatro puntos y medio por encima.

Mejor balance presenta el sector turístico, según se desprende del Observatorio, que valora como en la provincia fue donde menos alojamientos se cerraron y donde más crecieron las pernoctaciones y el número de viajeros, aunque las cifras siguen muy lejos de las anotadas antes de la emergencia sanitaria.

Frente a esto, el Colegio de Economistas de Valladolid, Palencia y Zamora (Ecova) hizo ayer un llamamiento al Ejecutivo autonómico para que acometa reformas de calado, «urgentes en Castilla y León», a través del consenso político y con el apoyo de los agentes sociales, para garantizar que la Comunidad alcance a principios de 2023 un crecimiento económico previo al que había antes de la pandemia.