Sube la pobreza energética con la pandemia
El 70% de los usuarios de Cruz Roja no pude mantener la temperatura en el hogar
La pobreza energética relacionada con la capacidad de los hogares de mantener una temperatura adecuada afecta al 9,1% de la población. Esta situación impacta especialmente sobre las personas vulnerables con las que trabaja Cruz Roja. Y la crisis económica generada por la covid-19 no ha hecho sino agravar la situación de vulnerabilidad. Si ya antes de la pandemia el 46% de las personas atendidas por Cruz Roja tenía dificultades para afrontar pagos de la vivienda y suministros, en la población atendida tras la declaración del estado de alarma, este porcentaje se incrementa hasta el 70,3%. Por otra parte, el 38,6% de las personas atendidas tras la pandemia también presenta problemas de salubridad en la vivienda (antes era el 31%).
Para apoyar a las personas afectadas por la pobreza energética, Cruz Roja desarrolla diferentes acciones que van desde la atención a necesidades urgentes, las ayudas para el pago de recibos, la entrega de kits de eficiencia energética hasta la participación en talleres de ahorro doméstico.
Para incrementar la intervención en el actual contexto de la pandemia, Cruz Roja ha tenido que adaptar sus metodologías para poder seguir atendiendo a las familias más vulnerables. «Todavía no podemos entrar en los domicilios, ni hacer formaciones en grupo y por ello se está potenciando las llamadas telefónicas individuales y los webinars grupales para ofrecer consejos de buenas prácticas de ahorro energético, asesoramiento con las facturas y detectar a través de estas llamadas cualquier necesidad adicional de intervención en los hogares», indica Sara Casas, de Cruz Roja.