Trámites
El retraso del centro de día de mayores hace peligrar una ayuda de 100.000 €
El Ayuntamiento trabaja aún en el reglamento para poner en funcionamiento el servicio
Hay hasta cinco empleadas ya contratadas desde principios de año —una terapeuta ocupacional, tres auxiliares y una limpiadora—, pero el retraso en la tramitación hace peligrar la subvención de 100.000 euros concedida por la Junta. No se podrá justificar hasta que el Ayuntamiento de León ponga en funcionamiento el nuevo centro de día de la residencia para personas mayores Virgen del Camino. El proyecto con el que se completa la oferta de servicios de la instalación municipal, ubicada en la avenida de San Mamés, debe salvar todavía la tramitación del reglamento de funcionamiento, la aprobación de la ordenanza fiscal en la que se marcará el coste para los usuarios e, incluso, la definición de cuántas plazas se pondrán a disposición. Los responsables insisten en que se quiere activar con carácter inmediato, aunque no hay un plazo fijo con el que se cuente por ahora para afianzar la iniciativa.
Obras y covid
El avance depende por el momento del reglamento. El borrador se llevó por urgencia a mediados de mes a la comisión informativa de Bienestar Social, Mayores e Igualdad, pero, tras aprobarse de manera inicial, se pactó dejarlo encima de la mesa las modificaciones necesarias para acoger las propuestas del resto de grupos de la oposición. El documento con las aportaciones será el que se haga pasar por el Pleno municipal, tras lo cual se someterá a información pública, resolución de alegaciones y ratificación definitiva. En suma, cerca de tres meses de gestiones que ajustan los «plazos existentes en relación a una subvención de 100.000 euros que ha sido concedida y que en otro caso se podría perder», como reconoció la concejala responsable, Lourdes González en la reunión en la que se trató el proyecto, según se cita en el acta.
El centro, cuya tramitación comenzó en el pasado mandato e incluso se había esbozado en el anterior, se presenta como «un servicio en el que se ofrece atención integral durante el día a las personas mayores autónomas o con limitaciones leves en su autonomía personal, con el fin de mejorar o mantener su nivel de autonomía personal mientras permanecen en su entorno y ambiente familiar», como se define en el borrador del reglamento. El programa se orienta sobre todo a personas que «precisan de ayuda para la realización de las actividades básicas y/o actividades instrumentales de la vida diaria, con el objeto de mantener, preservar y/o mejorar la funcionalidad de los usuarios y servir de apoyo a la familia», como se cita en el documento, que abunda en que «la finalidad esencial es ofrecer un espacio específico de apoyo preventivo y especializado a personas mayores autónomas o con limitaciones leves en desenvolvimiento, promoviendo su autonomía personal y la permanencia en su entorno habitual de vida, mediante actividades rehabilitadoras y estimuladoras».
El servicio funcionará, «con carácter general, durante todo el año, de lunes a viernes, excepto sábados, domingos y festivos (nacionales, autonómicos y locales), en horario comprendido entre las 10.30 y las 17.30 horas», de acuerdo a la información contenida en el borrador del reglamento. Los destinatarios deberán «tener cumplidos los 60 años; presentar un grado de deterioro cognitivo ligero; estar empadronados y ser residentes en el municipio de León, a fecha de presentación de la solicitud; y no padecer enfermedad que precise atención imprescindible y continuada en centro hospitalario». Además, se cita que «en todos los supuestos es necesario que las personas no padezcan ninguna enfermedad infecto-contagiosa, ni estén confinados en cama así como que no presenten, de forma habitual, comportamientos desajustados que imposibiliten o dificulten gravemente el normal funcionamiento u originen algún tipo de riesgo para el resto de las personas usuarias (agresividad, gritos, delirios, tendencia a escaparse, etcétera), ni alteraciones de conducta graves que hagan imposible su atención en el centro». Como conclusión, se establece que no podrán «haber sido objeto de privación de sus derechos de usuario en otros centros como consecuencia de resolución firme en expediente sancionador».
Pero no se recoge cuántos podrán entrar. Las plazas dependerán de cómo se reorganice la residencia para mayores, donde por ahora hay 41 personas internas: 21 asistidos y 20 más que se considera que tienen un grado de autonomía suficiente. Queda por contra otras 13 habitaciones libres de los primeros —más otras 8 por prevención en caso de covid— y otra veintena de los segundos. Con este escenario, la mitad de las instalaciones están desocupadas, pese a acumular una lista de espera de más de 200 personas, mientras se alude como justificación de manera reiterada a las restricciones de pa pandemia y las obras que han condicionado el funcionamiento ordinario.