Consejo de Cuentas
La Diputación de León es la que más logró recaudar en periodo voluntario
Cuentas ratifica que el grado de cobros en 2019 fue «muy elevado», de alrededor del 90%
Palacio de los Guzmanes, sede de la institución provincial. MARCIANO PÉREZ
La Diputación de León es la que consiguió una mayor tasa de recaudación en periodo voluntario en Castilla y León y sumó un total de 103,3 millones en el ejercicio de 2019. De esta cifra, 65.718.631,28 euros correspondieron a impuestos locales, 25.274.646,03 a las tasas y otros ingresos de derecho público y el resto, a otro tipo de ingresos.
El Consejo de Cuentas de Castilla y León, dirigido por el leonés Mario Amilivia, es la organización encargada de este tipo de fiscalizaciones, y señaló que «en periodo voluntario, los indicadores del grado de recaudación son muy altos, alrededor del 90% de lo puesto al cobro en todas las diputaciones». «Sin embargo, el grado de recaudación en fase ejecutiva es muy bajo en todas las diputaciones y tributos, apenas el 30% sobre la suma total de las nueve instituciones», añade el informe.
El organismo también publicó los datos referentes al número de municipios delegantes en la provincia leonesa, que resultó ser uno de los más bajos, con 206. Sólo Palencia y Soria poseían un número inferior. A pesar de esto, el número de recibos es de 425.429, una cifra elevada si se compara con la segunda, Burgos, con 291.264 recibos en 2019.
Administrativamente, la Diputación de León es, junto a la de Salamanca, la que más personal asignó a la prestación del servicio de gestión tributaria y a la recaudación. La mayoría de las diputaciones contratan servicios relacionados con la gestión tributaria, como los postales, bancarios, de impresión, de atención al contribuyente y de mantenimiento de aplicaciones o plataformas para llevar a cabo esta tarea. Los ingresos por la prestación del servicio ascendieron hasta los 3.761.212,58 euros. Los datos de la recaudación total llegaron hasta los 108.554.928,50 euros, provocando que en ambas categorías León liderase los datos autonómicos.
El Consejo de Cuentas de Castilla y León concluyó su fiscalización con una serie de observaciones: la provincia no operó con un organismo específico de recaudación, como otros territorios, y mostró unas cifras deficitarias en cuanto al proceso de gestión. La Diputación de León presta directamente el servicio de gestión tributaria y recaudatoria sin organismo diferenciado, contando para ello con siete oficinas o unidades y un total de 76 personas. En 2019 se creó específicamente una unidad de Inspección. Se está trabajando para crear una aplicación de administración electrónica. Con esto se espera que en ejercicios posteriores los cobros puedan tramitarse vía online .
La Junta realizó diez recomendaciones a la corporación leonesa de cara a próximos ejercicios, que contemplan aspectos comunes y orientados a mejorar los procedimientos y corregir las principales deficiencias detectadas.