Profesiones de alto riesgo cuando el sol aprieta

La ola de calor que sacude León con temperaturas que alcanzarán hoy los 36º centígrados en la capital convierte en una profesión de riesgo los trabajos que se realizan a la intemperie, sobre todo a las horas centrales del día, cuando los termómetros marcan su máximo, aunque apenas bajarán por la noche durante las dos próximas jornadas.

Tampoco saldrán indemnes del sofoco veraniego todas esas personas que trabajan entre fogones, algunos incluso sin aire acondicionado. O el personal de tintorería, que sufre las consecuencias del vapor que emana de las planchas y que convierte en una caldera los centros de trabajo. No va a ser fácil combatirla con el precio de la luz por las nubes.

Aunque estén al aire libre, los camareros notan igualmente las consecuencias de este calor asfixiante, debido a la entrada por el sur de una masa de aire muy cálida de procedencia africana. También sienten los efectos en el sector de la construcción o en el campo, donde se suele adelantar la jornada para evitar las horas de más calor.

En este sentido, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) recomienda a los trabajadores del campo que usen ropa limpia, ligera y fresca, y aumenten la ingesta de agua para evitar al máximo los riesgos ante la ola de calor que está viviendo España durante esta semana.

Factores como la edad y el sexo influyen en el riesgo ante este tipo de situaciones. Entre las recomendaciones que hace a los agricultores, además de la ropa amplia y de colores claros, aconsejan también evitar la exposición al sol de partes del cuerpo descubiertas, aumentar la ingesta de agua y sal para compensar las pérdidas que se producen con el sudor y si es posible, habilitar zonas de sombra o locales con aire acondicionado para el descanso de los trabajadores.

También es conveniente instalar ventiladores, equipos de climatización, persianas, estores y toldos para disminuir la temperatura en caso de locales cerrados y limitar las tareas pesadas que requieran un gasto energético elevado.

Desde Protección Civil alertan de que el «exceso de calor puede producir calambres, agotamiento, deshidratación e, incluso, vómitos, dolor de cabeza y, en los casos más graves, hasta convulsiones y entrar en coma.

Advierten al respecto que no se debe salir de casa entre las doce del mediodía y las seis de la tarde. «Evite comidas copiosas, tome verduras y frutas. Coma menos cantidad y más veces al día. No tome comidas calientes ni abuse de las bebidas alcohólicas. Reduzca la actividad física, descanse con frecuencia a la sombra y use ropa de tejidos naturales, ligera y holgada, de colores claros, sombrero, gafas de sol y cremas protectoras solares», advierten.

Los que tienen más riesgo de sufrir un golpe de calor estos días son las personas mayores, discapacitadas y los niños menores de 5 años. También los que tienen enfermedades crónicas o los que realizan trabajos físicos o actividades deportivas.