Las claves de la estructura ferroviaria
El plan de Adif que barre a León en el mapa ferroviario del noroeste
La válvula prevista en Valladolid para dar salida el tráfico transversal vacía de contenido la posición leonesa en la estructura del ferrocarril
El primer hachazo a la fortaleza indiscutible que gozaba León en el mapa ferroviario, el enclave del noroeste por el que fluía la circulación hacia el cantábrico y a la fachada atlántica, se decidió al elegir la traza de Zamora para llevar la alta velocidad a Galicia; la estocada definitiva llega ahora, con la intervención sobre la intersección del AVE en Olmedo (Valladolid) y, que completa con la variante de mercancías de la capital castellana una inversión de setenta millones de euros, y desplaza el eje ferroviario del noroeste fuera del noroeste, y deja a León en medio de un escenario vacío, un territorio que ya representa un dibujo desierto de contenido en la planificación de la estructura ferroviaria del futuro. Los propios mapas que maneja Adif para explicar cómo será el tren a corto y medio plazo en el cuadrante noroeste de la península muestran un blanco sobre le territorio que representa a León.
La afamada U de Olmedo, proclamada como el gran logro ferroviario del siglo por parte del anterior ministro socialista de la obra pública del Gobierno, es una válvula que permite a los convoyes enlazar las línea de la alta velocidad a Galicia con el ramal que llega a Valladolid, y desde allí abrir el paso hacia Burgos y al Ebro; el sueño de los trenes en la línea de alta velocidad con circulación transversal, sin la esclavitud de la dictadura radial de las conexiones que pasan por la capital de España; lo que ahora engarza el Alvia a base de solapar enlaces, en un trayecto único. El nudo para rescatar al noroeste, lejos del noroeste. El nudo, en Valladolid. Este mismo mes, Adif licitó la operación, que a través de ocho kilómetros permitirá el giro. Un gran paso para las conexiones ferroviarias; un retroceso para León, que pierde orientación y posición como enclave en el filtro de los tráficos ferroviarios de viajeros y ve cómo se le abre una vía de agua imparable en el sector de las mercancías.
Los primeros efectos de la centralización en torno al centro de Castilla de la sucursal del círculo radial en la disposición que tanto se critica en torno a Madrid ya tiene efectos en la parrilla de viajeros en la provincia de León; el primer avance, como si fuera en una discurso de un capítulo por entregas, se acaba de llevar por delante la Unidad, aquel tren que primero dejó de circular entre Ponferrada y la capital leonesa, y ahora acaba de firmar la baja en el panel de la estación de la capital del Bierzo. Los trenes equilibristas sujetos a la obligación de servicio público y dependientes de las ayudas autonómicas de los territorios en los que prestan servicios. Al margen, sin AVE al oeste de la capital leonesa por donde discurre la vía convencional que unió el centro de la península con Galicia desde que el tren tiene memoria en España, la sangre deja de correr por esta arteria, sin esperar a que se cubra en todo su recorrido la línea de alta velocidad que se estrena por fragmentos hasta alcanzar casi el límite de provincias entre Zamora y Orense. La alerta que lanzó días atrás Coalición por El Bierzo, con la valentía a la que no se atreven otros partidos políticos condicionados por la implantación territorial, está más cerca de un aviso contra los acontecimientos a corto plazo en la oferta de trenes que circulan por la vía del oeste en la provincia de León que de ser un vaticinio sin fundamento.
Desde el AVE a Galicia
La hemorragia ferroviaria de León se agudiza al desplazar de León el eje del cuadrante periférico
El sector ferroviario leonés teme que no haga falta esperar a que Adif complete la válvula de Valladolid para centrifugar entre Olmedo y aquella ciudad toda la oferta de trenes de viajeros del eje noroeste peninsular, de la periferia de la periferia, para que el Alvia que une La Coruña con Barcelona salga de Galicia por la vía de Alta Velocidad, la de Zamora, y no por esos maltrechos raíles por los que se une León, Astorga y Ponferrada y Monforte, con el anacrónico lazo del Manzanal de por medio. Y, en el hipotético caso de que los trenes nocturnos regresen a la vía, el célebre Shanghái que tanta demanda de viajeros solventó en la estación leonesa, tiene difícil acomodo en la vía de León que dejó semi enterrada la alta velocidad por el bajo Duero.
Los planes del Gobierno son iniciar en año y medio esta reforma de la plancha ferroviaria, y permitir el recorte, el recorte de la circulación de trenes de costa a costa, que va a actuar con un efecto imán para los convoyes de viajeros; también para las mercancías, que tienen las perspectivas bien definidas para compartir circulación por las vías de alta velocidad; tal y como se plantea ya en algunos tramos del mediterráneo, tal y como se planifica para la puesta en servicio de la Variante de Pajares; y tal y como se terminará por hacer extensivo a la vía del AVE a Galicia que exprimirá al máximo las oportunidades de negocio par la conexión con los puertos del extremo oeste de la península.
Latitud sur
La obra en Olmedo abre una vía de agua que llevará tráfico de León a la vía del AVE de Zamora
León ya analiza con preocupación el aislamiento al que ha quedado sometido más de la mitad de su territorio de las líneas de la vanguardia ferroviaria, y la estrategia que ya está en marcha para adaptar los sistemas de motor y remolcado de las mercancías a los cánones competitivos. Los vagones de mercancías se construyen en ancho variable; y las locomotoras comienzan a copar el mercado con modelo adaptadas a la bitensión, necesaria para ejercer la tracción que espera la división de mercancías ferroviarias, cada vez más extendida con la incorporación de operadores privados, para mover negocio en las trazas punteras del ferrocarril.
En ese horizonte contemplado para el noroeste ya no aparece León; el León que aún se atreven a halagar los mensajes políticos como nudo o nodo del noroeste español a efectos de la estrategia territorial de la que depende el desarrollo social y económico de este cuadrante periférico.
Las soluciones que hasta hace un cuarto de siglo prestaba León sin competencia alguna, se empiezan a ventilar ahora a doscientos kilómetros al sur del epicentro del noroeste que la inversión en Olmedo desnudará de expectativas. Fuera del eje transversal, que lo aleja cada vez más de las conexiones con Barcelona, tan demandadas en la provincia; y un boquete de dudas en el área de mercancías porque enseña una salida insospechada que vaciará las viejas vías leonesas.