Diario de León

Sucesos

Un jurado popular juzgará desde el 29 de noviembre el crimen de Villaobispo

La fecha inicial tuvo que ser modificada por la pandemia; el juicio reabre el ritmo normal

El cadáver del fallecido es trasladado al Instituto de Medicina Legal de León. NORBERTO

El cadáver del fallecido es trasladado al Instituto de Medicina Legal de León. NORBERTO

León

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La Audiencia Provincial juzgará por el sistema del Tribunal del Jurado el crimen de Villaobispo, en una vista que se prolongará desde el 29 de noviembre hasta el 2 de diciembre, tras haber sido suspendida en su momento por culpa de la pandemia. La cita marca el primero de los numerosos juicios mediáticos que se celebrarán por este sistema durante los próximos meses, en un intento por reducir la numerosa nómina de señalamientos pendientes en materia penal.

El Ministerio Fiscal solicita penas de trece años de prisión para los acusados, dos hermanos a los que se atribuye un delito de homicidio, por la muerte a tiros de un varón en Villaobispo, la mañana del 8 de noviembre de 2008. Agresores y agredidos pertenecían a familias lejanas supuestamente enfrentadas.

Final del caso

El veredicto será leído previsiblemente el día 2 de diciembre, tras la deliberación

Los sospechosos habían permanecido en busca y captura desde entonces. Inicialmente fue detenido un tercer familiar de los investigados, pero se comprobó que no había sido el autor de los disparos mortales.

El juicio estaba señalado para el 15 de mayo de 2020 en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, pero las condiciones de la pandemia lo imposibilitaron.

Los dos hermanos acusados habían tenido enfrentamientos con los familiares del fallecido en sendos tiroteos en Plasencia y Coria (Cáceres) en octubre de 2006 y septiembre de 2008.

De acuerdo al escrito de calificaciones provisionales del Ministerio Fiscal, sobre las 13.15 horas del día de autos, los dos sospechosos (que residían en Villaobispo tras haber alquilado la vivienda unos meses antes) estacionaron sus vehículos en la calle en la que vivían.

Desde Estremadura

En ese momento, el fallecido se bajó de otro coche en el que permanecía junto a otros dos hermanos suyos (habían venido a buscarles desde Extremadura para dirimir sus diferencias) y realizó un disparo inicial de escopeta.

Los acusados respondieron utilizando sendas armas cortas y uno de los diez tiros realizados según la investigación le alcanzó en el costado izquierdo, sin que conste quién empuñaba cada uno de los dos revólveres con los que se cometieron los ataques.

Los hechos constituyen un supuesto delito de homicidio, por el que la Fiscalía propone trece años de prisión. También se incluye una propuesta de un año y medio de cárcel por tenencia ilícita de armas.

El fallecido tenía 31 años de edad en el momento de los hechos y dejó dos hijos que en aquellas fechas tenían nueve años y doce meses respectivamente, para los que se reclaman las indemnizaciones correspondientes, que de momento no han sido fijadas. También exigen su compensación la madre del fallecido y la compañera sentimental del fallecido, madre de sus dos hijos, según consta en el apartado de indemnizaciones que se proponen por parte del Ministerio Público.

El juicio se iniciará el 29 de noviembre, con la constitución del jurado popular y teóricamente el primer turno de interrogatorio de los acusados.

Así se procederá después con los testigos y peritos, hasta el día 2 de diciembre, fecha en la que el jurado deberá deliberar para considerar si los sospechosos son declarados culpables o no, circunstancia que determinarán en el veredicto que se leerá al término del proceso.

En Salamanca

La detención de los acusados se produjo en abril de 2018 en Salamanca. Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional capturaron a seis personas pertenecientes al clan conocido como Los Manueles y desarticularon una organización criminal dedicada al narcotráfico implicada en un intento de homicidio en la capital salmantina. Entre los detenidos se encontraba el acusado como autor material de los disparos de Villaobispo.

La población de Moraleja (Cáceres), donde los protagonistas eran conocidos por su largo historial delictivo, ya sabía de sus andanzas antes de estos hechos. Ahora se conocerán en el juicio los detalles de sus versiones respectivas.

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